Badalona

Albiol recupera la alcaldía de Badalona por el desacuerdo entre PSC y las fuerzas separatistas

La CUP no ha aceptado la propuesta de los socialistas catalanes de turnarse el mando un año y medio cada partido

Xavier García Albiolha recuperado la alcaldía de Badalona, que ya ostentó entre 2011 y 2015. Lo ha hecho gracias a ser la fuerza más votada en las elecciones de 2019 -11 concejales- y gracias al desacuerdo entre los partidos de la oposición. La actitud de CUP y de su candidata Dolors Sabater, que se ha mostrado intransigente en todo momento pese a la generosa oferta de última hora del PSC, ha hecho imposible un pacto del resto de fuerzas políticas e inalcanzable los 14 regidores necesarios para imponerse al Partido Popular.

La incertidumbre se ha prolongado hasta el final. O casi. La incógnita ha empezado a despejarse cuando Rubén Guijarro, el candidato del PSC, ha subido a la tribuna y ha anunciado su candidatura, dando “de facto” roto el incipiente acuerdo al que se llegó ayer junto a ERC, Comunes y Junts per Catalunya. La CUP de Sabater se negó a firmar el citado acuerdo que repartía la alcaldía un año y medio entre ella y el socialista Guijarro. Sin esa firma, el PSC ha dado por roto el acuerdo y ha votado a su candidato. La desconfianza entre ambas formaciones ha hecho el resto. La situación era tal que los Comunes y ERC intentaron, al menos en dos ocasiones, un receso que permitiera recoser el acuerdo roto en pedazos.

Tal y como hoy ha avanzado LA RAZÓN, la ruptura se veía venir. La CUP, con sólo cuatro concejales, quería la alcaldía durante dos años “porque los socialistas ya han gobernado uno”, en referencia al pleno que designó a Alex Pastor alcalde en 2019. Su empecinamiento ha llevado a Sabater a no convocar a una consulta de las bases de su partido “ante la creciente división interna”, lo que ha permitido que García Albiol llegue al gobierno de la localidad. Sin embargo, otras fuentes consideran que “Sabater no tenía ninguna intención de aparecer como supeditada de nuevo ante los socialistas” y, sobre todo, “en sectores de la CUP no se quería asumir la responsabilidad de gobernar en esta crisis de la pandemia”.

De esta guisa, la izquierda de Badalona ahonda su profunda crisis más dividida que nunca. Hoy Sabater ha recibido los votos de ERC, Comunes y Junts per Catalunya, pero ha tenido que oír las duras críticas de estos grupos por no apoyar el acuerdo alcanzado ayer. El PSC siempre reacio a dar apoyo a Sabater, ha realizado hasta cinco propuestas en estos días, como ha recordado Guijarro en su intervención en el pleno, que siempre han sido rechazadas por la CUP. En el entorno socialista, ha aumentado su animadversión a los independentistas radicales porque “son incapaces de llegar a acuerdos y han preferido a García Albiol antes que un candidato socialista”.

El nuevo alcalde de la ciudad se ha mostrado prudente en toda esta crisis tras la dimisión del anterior alcalde, detenido tras un control en pleno confinamiento con síntomas de alcoholemia por los Mossos d’Esquadra. Su estrategia ha sido no dar argumentos a sus adversarios que hicieran posible la argamasa de una alternativa pentapartita. Su estrategia ha sido acertada a tenor de los resultados. Siempre defendió la legitimidad para gobernar por ser la lista más votada, pero evitó entrar en polémicas estériles. Polémicas que sí han mantenido todos sus adversarios, agudizadas por la intransigencia de Sabater que ha dado al traste con todas las propuestas que provenían de los socialistas y que contaban con el apoyo del resto de formaciones.

“Es un día de luto, porque García Albiol, vuelve a la alcaldía, y de vergüenza, después de lo que ha hecho la CUP”, afirma un militante socialista. De hecho, en estos días un argumento que verbalizó el líder de Junts per Catalunya que afirmó “si Xavier García Albiol llega a la alcaldía, mucha ciudadanía pura lo percibirá que lo puede hacer mejor y puede ser que en 2023 arrase y saque una mayoría absoluta” y se preguntaba “¿nos podemos permitir el lujo de que Xavier García Albiol gobierne?”. La respuesta ayer en el pleno: para alguna izquierda, los independentistas radicales y anticapitalistas de la CUP, parece ser mejor que gobierne la derecha.

Albiol vuelve en 2020 a recuperar la alcaldía que dejó en 2015. En 2011, los socialistas sufrieron una fuerte debacle y dejaron de ser primera fuerza por la crisis del procés, pero también por un problema de liderazgo. Tras las elecciones de 2015, todas las fuerzas políticas auparon a Dolors Sabater a la alcaldía. Las polémicas y la gestión, muy puesta en duda y marcada casi únicamente por un independentismo activista desde las instituciones, acabaron con su vara de mando en manos del PSC en 2018, que llegó a la alcaldía con el apoyo del PP. En 2019, los socialistas consiguieron la unidad de todas las fuerzas para hacerse de nuevo con el sillón de primer edil, pero la dimisión de Pastor tras el incidente con los Mossos, ha roto cualquier reedición del acuerdo. De hecho, los propios socialistas han dado ya por descartado una moción de censura.