Gonzalo Sapiña: el “influencer” acusado de estafa y fan de Zuckerberg

Gonzalo Sapiña es un nombre que hasta la mañana del 29 de enero de 2021 era un popular “youtuber” e incluso “influencer”, muy conocido en estos ámbitos, pero desconocido para el gran público. El joven ha sido noticia no por uno de sus muy visitados videos en la web de YouTube, sino por su detención y posterior puesta en libertad. El arresto tuvo lugar el 18 de enero en Andorra

La noticia fue difundida por primera vez por el “Diari de Andorra”, y en ella se explicaba la trama de Sapiña y cinco colaboradores. Pertenecen todos a la empresa de trading GNZ Academy. La operación fue a cargo de la Guardia Civil, Mossos d’Esquadra y la Policía de Andorra. El presunto delito de estafa podría haber afectado a más de 11.000 personas.

El salto a la fama de Sapiña está relacionado con el mismo elito, ya que sus videos tratan inversiones digitales, sobre las las que aconseja a los “followers”. Según las investigaciones judiciales, los detenidos y el “influencer”, presuntamente, habían formado una estafa piramidal a base de inversiones de personas que reclutaban mediante cursos de “Trading” -compraventa a corto plazo de productos financieros o criptomonedas como el Bitcoin- por redes sociales que promocionaban gracias a plataformas como Instagram, donde Sapiña cuenta con 90.000 seguidores.

Ofrecían grandes rentabilidades en poco tiempo, un hecho que muchos seguidores de las “escuelas de inversión” que lideraban los detenidos, ya habían denunciado. Después de quedar libre, Sapiña ha explicado -obviamente, a través de un video- que “todo había sido un malentendido” y agradeciendo los miles de mensajes de apoyo. Ante el juez, se negó a declarar.

GNZ Academy ofrecía cursos que van desde los 99 a los 599 euros sobre criptomonedas e inversión en bolsa y prometían una rentabilidad de hasta el 80% en las operaciones.

Según avanza el diario andorrano, al parecer se decretará prisión para Sapiña, mientras que se desconoce la pena del resto de jóvenes porque no se sabe si llegaron a vender algún curso o eran conocedores de que detrás del producto que promocionaban había una supuesta estafa. Aun así, estos cinco colaboradores sí se enfrentan a penas por estar en situación ilegal en Andorra.

Asi las cosas, el joven “influencer” tiene más de 90.000 seguidores en Instagram -cuenta que ahora tiene privada- y un canal de YouTube con apenas 4.810 seguidores.

Su ritmo de vida real con toda seguridad no era de la categoría de la que le gustaba presumir: lujos y alquiler de coches de alta gama para publicar vídeos que podían dar a entender su elevado nivel de vida con las inversiones que promocionaba.

En una de sus grabaciones aseguraba haber ganado un millón de euros con una sola operación. Sin embargo, GNZ Academy tenía multitud de críticas negativas de personas que avisaban de la poca fiabilidad de la empresa, e incluso otras la tachaban directamente de estafa.

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) abrió por su parte una reclamación que finalmente se cerró sin frutos en el que muchos alegaban que era imposible recuperar el dinero que habían invertido.

Siempre según los medios andorranos, piña lleva viviendo en Andorra desde octubre de 2019, cuando se mudó con su pareja y otros 8 ayudantes más. Nació en Barcelona hace 34 años.

En 2013, importó una iniciativa de Nápoles llamada “Cafés Pendientes” que consistía en dejar pagado un café en los restaurantes para las personas sin recursos. También se dedicaba a asesorar empresas, y tenía a Mark Zuckerberg de ídolo.

“Aquí las oportunidades son mucho mayores, hay que reinventarse y pensar, no irse a otro país. Yo soy partidario de que la gente innove y se quede”, declaró a un periódico español. “La empresa que está en Internet tiene que hacerlo suficientemente bien como para que el usuario no pague nunca”, ya dejó entrever.

En octubre de 2018 también hizo una aparición en el canal del youtuber Thetoretegg1 para participar en un reto económico jugando a Fortnite. En el vídeo, el dueño del canal asegura que acudió a una habitación de hotel que costaba 11.500 euros la noche: “Uno de los que lo ha pagado es millonario”.

Gonzalo Sapiña era el chico que se hospedaba allí y, aparentemente, le dijo a Thetoretegg1 que le daría 500 euros por cada muerte que lograra en el videojuego online. De hecho, en el vídeo aparece con un fajo de billetes de 50 euros para poder hacer el reto, demostrando una vez más su elevado nivel de vida.