La Junta Electoral ordena retirar el escaño de un diputado condenado de la CUP

Bronca a la vista en el Parlament. La Junta Electoral Central (JEC) ha ordenado retirar el escaño al diputado de la CUP y miembro de la Mesa del Parlament, Pau Juvillà, tras haber sido condenado a seis meses de inhabilitación por un delito de desobediencia. El motivo de la condena es que no retiró los lazos amarillos del Ayuntamiento de Lleida, donde ejercía como concejal, durante las elecciones municipales de 2019, cuando se le había reclamado.

Juvillà ha sido condenado por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña y el Parlament puede volver a convertirse en el escenario de un desafío a la Ley porque está en manos de la presidenta Laura Borràs decidir si acata la orden de la JEC o desobedece.

El precedente más reciente es el de Quim Torra, que fue condenado por el TSJC y la JEC ordenó que se le retirara el escaño. Roger Torrent (ERC), entonces presidente de la cámara catalana, accedió a acatar y eso generó una bronca con JxCat porque defendía que había que desobedecer.

Finalmente, Torra perdió el escaño, pero mantuvo la presidencia de la Generalitat, generándose una situación inédita en la política catalana porque el president siempre tiene que ser elegido entre los 135 parlamentarios (a diferencia de lo que ocurre en España) y, por tanto, a lo largo de su mandato debe conservar su asiento en la cámara.

En este sentido, la propia Borràs puede tener sensibilidad con este caso porque también puede ser inhabilitada si el TSJC así lo considera en la causa que está investigando por las supuestas adjudicaciones a dedo cuando estaba al frente de la Institució de les Lletres Catalanes.

Reacciones

Tras la decisión de la JEC, se ha desatado una cascada de reacciones políticas. La primera y más importante es la de Borràs, que ha asegurado que apoyará y acompañará al diputado de la CUP, dejando entrever que desobedecerá: “Sabes que me tienes a tu lado”. “Siempre he dicho que protegeré los derechos de todos los diputados para garantizar los derechos y libertades de sus electores y que hay que respetar el principio antirrepresivo básico de acompañamiento de la persona afectada y su organización. Pau Juvillà”, ha afirmado en un tuit. Cuando Juvillà fue inhabilitado, Borràs avisó de que no tenía ninguna voluntad de retirarle el escaño y el pleno del Parlament aprobó un dictamen que defendía mantenerle el acta de diputado hasta que no haya sentencia firme.

El grupo de la CUP en el Parlament ha defendido que Juvillà mantenga su escaño pese a que la Junta Electoral Central (JEC) haya acordado retirar su credencial: “Es el Parlament quien es competente”, ha argumentado la formación. El 17 de diciembre, el Parlament aprobó un dictamen --con el apoyo de 116 diputados del PSC, ERC, Junts, CUP y comuns-- que acordaba que Juvillà mantendría su acta de diputado hasta que no hubiera sentencia firme. “Como es el Parlament de Catalunya quien es competente en esta cuestión, y no la JEC, nos acogemos al dictamen del 17 de diciembre”, ha subrayado la formación anticapitalista

También Pere Aragonès ha reaccionado, aunque, en su caso, tampoco tiene mucho que hacer. “La decisión de la Junta Electoral solo persigue la libertad y los derechos políticos más elementales”, ha criticado el presidente catalán. “Siempre firmes contra la represión. Por la libertad y por la democracia. A tu lado”, ha afirmado.