Municipal

Barcelona presenta la canidatura de Ciutat Vella al Plan de Barrios

El Ayuntamiento quiere rehabilitar la antigua fábrica de Can Seixanta en el Raval

(Foto de ARCHIVO) La consellera de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica, Sílvia Paneque, durante la clausura de la última presentación del Pla de Barris i Viles de Catalunya 2025-2029 REMITIDA / HANDOUT por Generalitat de Catalunya Fotografía remitida a medios de comunicación exclusivamente para ilustrar la noticia a la que hace referencia la imagen, y citando la procedencia de la imagen en la firma 24/05/2025
La consellera de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica, Sílvia Paneque, durante la clausura de la última presentación del Pla de Barris i Viles de Catalunya 2025-2029Generalitat de CatalunyaEuropa Press

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, anunció ayer la presentación a la Generalitat del proyecto de ampliación y refuerzo del Pla de Barris de Ciutat Vella dentro de la convocatoria del Pla de Barris i Viles de Catalunya 2025-2029, una iniciativa que cofinancia proyectos de transformación urbana y social en municipios de más de 20.000 habitantes. El consistorio opta a una subvención de hasta 12,5 millones de euros —que se complementarán con otros 12,5 millones aportados por el Ayuntamiento— para ejecutar un total de 31 actuaciones en este distrito, uno de los más vulnerables de la ciudad.

El proyecto, ya aprobado por la Comisión de Gobierno, tiene un presupuesto total de 25 millones de euros y se centra en tres ejes fundamentales: la rehabilitación de edificios, la mejora de la accesibilidad y el fortalecimiento del tejido comunitario. «De la misma manera que muchas de las políticas de promoción de vivienda protegida van dirigidas a los más jóvenes, también queremos ofrecer una línea de apoyo a las personas mayores que viven solas y que sufren cada día las consecuencias de no tener ascensor en sus edificios», explicó Collboni durante la rueda de prensa.

Entre las actuaciones más destacadas figura la rehabilitación integral del edificio del número 20 de la calle Riereta, parte del conjunto histórico de la antigua casa fábrica de Can 60, en el Raval. Esta intervención permitirá crear diez nuevas viviendas de protección oficial y avanzar en la recuperación de todo el complejo. Asimismo, el Ayuntamiento reforzará el programa de rehabilitación de fincas de alta complejidad, conocido como FAC, que ya ha mostrado resultados positivos en otros barrios de la ciudad.

Según el consistorio, el parque de vivienda de Ciutat Vella es uno de los más antiguos de Barcelona y requiere una actuación integral. Para planificarla con precisión, se ha encargado a la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) un estudio diagnóstico que permitirá dimensionar las necesidades reales del distrito. «Queremos impulsar una rehabilitación que no solo mejore las condiciones físicas de los edificios, sino que también refuerce la convivencia y el vínculo vecinal», añadió el alcalde.

Ascensores

Otro de los pilares del plan es el nuevo programa de instalación de ascensores. Actualmente, el 75% de los edificios de más de dos plantas en el distrito carecen de este equipamiento, mientras que el 32,4% de las personas mayores de 65 años viven solas. El director general de Fomento de Ciudad, Álex Montes, subrayó que, si la subvención se aprueba, el ritmo de instalación podría alcanzar «hasta 30 edificios al mes».

Collboni celebró la recuperación de la llamada «ley de barrios» por parte de la Generalitat, una herramienta que, recordó, «fue uno de los proyectos de transformación urbana y social más importantes de las últimas décadas en Cataluña, impulsado durante los gobiernos de Pasqual Maragall y José Montilla». Según destacó, Barcelona recuperó ese espíritu hace ocho años con la creación de su propio Pla de Barris, que actualmente actúa en 27 barrios de la ciudad considerados prioritarios. En el caso de Ciutat Vella, el plan se articula en torno al Pacte per Ciutat Vella, con el objetivo de reducir desigualdades y mejorar la calidad de vida de los vecinos. «El Pla de Barris combina la transformación física del espacio urbano con el acompañamiento social y comunitario», concluyó Collboni, que confió en que la Generalitat resuelva la convocatoria antes de que finalice el año.