El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha recibido este viernes en el Palau de la Generalitat a la alcaldesa de El Prat de Llobregat, Alba Bou, tras el anuncio del acuerdo entre el Gobierno central y la Generalitat, con el aval de Aena, para ampliar el Aeropuerto de Barcelona-El Prat. La propuesta contempla una inversión de 3.200 millones de euros y prevé alargar 500 metros la pista más próxima al mar, además de la construcción de una nueva terminal satélite y la mejora de las actuales terminales 1 y 2.

El encuentro entre Illa y Bou estaba agendado antes de que se hiciera público el plan, pero ha cobrado un significado político especial tras las críticas expresadas por la alcaldesa al conocer el contenido del proyecto. Bou ha reprochado al presidente de la Generalitat que se haya anunciado una decisión que no ha sido consensuada con el territorio y ha pedido abrir un debate "con rigor técnico y seriedad” que analice las repercusiones ambientales, urbanísticas y sociales de la ampliación.

Rechazo, pero sin cerrar la puerta

Aunque Bou ha manifestado su rechazo a la propuesta tal y como se ha presentado, no ha cerrado completamente la puerta al proyecto. Tras revisar la documentación, que ha calificado como “vaga” y “poco concreta”, ha pedido más detalles técnicos y garantías sobre el impacto en el litoral del municipio.

En sus declaraciones, la alcaldesa ha urgido al president Illa a priorizar inversiones sociales y de proximidad antes que grandes infraestructuras. En concreto, ha exigido mejoras urgentes en el servicio de Rodalies, el impulso a una estación intermodal que conecte trenes de alta velocidad con el aeropuerto, y la reactivación del proyecto de Área Residencial Estratégica Ronda Sud-Aeroport, que permitiría edificar 520 pisos protegidos.

Prioridades: vivienda, barrios y salud mental

Además, Bou ha pedido al Govern que retome la Ley de Barrios, como vía para rehabilitar zonas degradadas del municipio como Sant Cosme, la Granja o Sant Jordi. En materia sanitaria, ha reclamado más profesionales en salud mental en El Prat y la firma de un convenio que permita concertar las plazas de la nueva residencia municipal para personas mayores.

En conjunto, la alcaldesa ha mostrado su disposición al diálogo, pero también firmeza frente a un proyecto que, asegura, no puede imponerse sin escuchar a los vecinos: “No se trata de estar a favor o en contra de ampliar un aeropuerto, sino de si este es el modelo de país que queremos y si estamos dispuestos a anteponer el cemento a las personas”.