Sucesos

Los padres del menor autista Pol: "No denunciaremos a la Generalitat de Cataluña, eran burlas y no 'bullying'"

El chico sigue postrado en el hospital con múltiples fracturas tras caer desde 14 metros.

La entrada del centro Els Alfacs, en La Ràpita
La entrada del centro Els Alfacs, en La Ràpita Juliia Herrera Velasco

La familia de Pol, el joven estudiante tarragonés de 15 años con autismo que se intentó suicidar tirándose por un cuarto piso, descarta tomar acciones legales contra el Instituto Alfacs de la Ràpita o a la Generalitat por acoso escolar a su hijo. En declaraciones a la Cadena Ser, los padres afirmaron que los Mossos les aseguraron que no se habría producido “bullying” denunciable penalmente, aunque las burlas sufridas por el menor serían uno de los motivos por los que habría intentado quitarse la vida, el pasado 20 de febrero.

Pol sigue ingresado en el Hospital Joan XXIII de Tarragona, donde se recupera de las heridas sufridas después de precipitarse desde una altura de 14 metros. Según los padres, han dado a conocer el caso a instancias de su hijo, para que hechos como éste no se vuelvan a repetir.

El delegado del Govern en las Terres de l’Ebre, el rapitense Albert Salvadó, ha apuntado que son casos que «hacen daño como sociedad» y que se implementarán «todas las medidas posibles para identificar perfectamente las causas y que no se vuelvan a repetir». Educació y los Mossos d’Esquadra mantienen abierta la investigación para determinar estas causas.

Sus padres, Josep y Júlia, llevan desde el pasado lunes 20 de febrero, cuando sucedieron los hechos, informando a través de sus redes sociales de los avances de su hijo y denunciando la situación de discriminación que sufría en el colegio a causa de su grado de autismo. Discriminación que el propio menor explicó en la carta de despedida que escribió a su familia antes de lanzarse al vacío

Un mensaje del padre en Facebook se viralizó este lunes y dio a conocer el caso de Pol, que llevaba una semana en el Hospital de Reus, recuperándose de las heridas que sufrió tras el impacto. Pol “milagrosamente ha sobrevivido a una caída de 14 metros”, pero tiene “brazos, piernas y dos costillas rotos, además de dos vértebra fracturadas” y “ya lleva varías cirugías”, publicó el padre.

Aun así, han asegurado que “Pol quiere ponerse bien para empezar una nueva vida y poder explicar su experiencia y concienciar a los adolescentes que con su actitud pueden provocar estas situaciones”, ha publicado la madre, haciendo referencia a los posibles episodios de acoso o discriminación que sufría Pol en el instituto.

Los padres han informado a varios medios de comunicación que ya en enero tuvieron una reunión con la tutora de Pol para advertirla de que su hijo se estaba sintiéndose discriminado. En especial, en clase de educación física, puesto que varios compañeros se burlaban de él. El instituto Els Alfacs, sin embargo, a pesar de reconocer dicho encuentro, aseguran desconocer que el menor sufría bullying.