El secretario de la EMT dimite por el escándalo de su relación con el cuñado de Ribó

El escándalo de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de Valencia se ha cobrado su segunda víctima, aunque en esta ocasión ha sido en forma de dimisión y no de despido fulminante. La decisión del secretario asesor de esta entidad pública, Salvador Martínez Tarín, de dejar su cargo pilló ayer a algunos por sorpresa, mientras que otros consideraron que era la respuesta lógica tras ponerse en tela de juicio su trabajo en el seno de la EMT y después de que se conociera que su bufete y el del cuñado del alcalde Joan Ribó estaban relacionados.

Martínez Tarín tomó la decisión por «motivos personales», según informó la propia EMT, desde donde recordaron que los servicios jurídicos del Ayuntamiento avalaron su contratación como cargo de libre designación.

La EMT agradeció su trabajo durante estos cuatro años «para llevar a cabo la renovación y el cambio estructural de la empresa, conseguir el primer texto refundido del convenio colectivo, ampliar el objeto social y asegurar la condición de empresa pública municipal de manera indefinida, entre otras tareas (...) Su trabajo ha sido indispensable para hacer de la EMT la empresa puntera que es actualmente. Además, esta labor se ha realizado reduciendo considerablemente los costes económicos para la empresa en relación al periodo anterior del PP».

Robo de 4 millones

El pasado mes de septiembre la EMT fue víctima de una estafa de más de cuatro millones de euros por parte de un grupo de ciberdelincuentes que lograron que se les realizaran ocho transferencias a una cuenta de un banco de Hong Kong (China). El escándalo supuso el despido fulminante de la entonces jefa de Administración, Celia Zafra, que en sede judicial ya ha negado formar parte del fraude y declaró ser una engañada más.

En medio del revuelo y mientras se organizaba un grupo de trabajo para investigar qué falló para que robaran 4,04 millones de lar arcas municipales, el concejal de Movilidad y presidente de la EMT, Giuseppe Grezzi (Compromís) y el gerente de esta empresa pública aprobaron un aumento salarial del 500 por ciento a Salvador Martínez Tarín (un sueldo de 3.000 euros al mes más complementos).

Más allá de la estética, la subida fue duramente criticada por los partidos de la oposición, tanto por el fondo, como por la forma y el momento elegido.

Esta misma semana, para acabar de caldear el ambiente político, se ha confirmado el vínculo de Martínez Tarín con Daniel Pérez, cuñado de Ribó - el hermano de la pareja del alcalde preside Abastos Abogados, que tiene el 32 por ciento del despacho del secretario de la EMT-.

Un hecho que, no obstante, ha negado el edil. «Nunca ha estado contratado por la EMT ni es socio de la empresa», ha declarado respecto a su familiar.

Responsabilidad política

Una explicación que no acaba de convencer a los grupos de la oposición. Ayer, la portavoz del PP en el Ayuntamiento de Valencia, María José Catalá, aseguraba que la dimisión del secretario asesor de la EMT - que desde 2015 ha facturado 220.000 euros con la empresa municipal de transporte- «debe ser la primera de una retahíla en la cúpula» de esta empresa municipal e instaba al alcalde a «asumir responsabilidades políticas por mentir y ser negligentes».

Según Catalá, Joan Ribó y el concejal Giuseppe Grezzi, «se equivocan si creen que con esa dimisión se ha cerrado el escándalo» en torno a la gestión de la empresa pública.

También exigió que el alto cargo que deja ahora su puesto «renuncie a los tres meses de blindaje que contempla el contrato aprobado por Compromís y el PSPV».

Por su parte, el grupo municipal de Ciudadanos anunció ayer que va a exigir en el Pleno una investigación por un presunto tráfico de influencias en la contratación en la EMT del bufete de abogados de Martínez Tarín.

El portavoz de Ciudadanos, Fernando Giner, manifestó que «a lo largo de estas semanas, se ha conocido la relación del cuñado de Ribó con la EMT y el cobro de determinadas cantidades de dinero. En esa comisión se deberá determinar responsabilidades políticas». Recordó que en el artículo 23 de la Ley de Régimen Jurídico del Sector Público, se plantea la obligación de abstención en caso de parentesco o relación familiar, «así que el alcalde de Valencia no debería estar presente durante la votación de la comisión».

«Un trabajo colosal», según Grezzi

«El secretario de la EMT ha hecho un trabajo colosal». Así defendió ayer Grezzi a Martínez Tarín después de hacerse pública la dimisión de una persona que él mismo nombró «por su gran valía». Sobre los 150.000 euros de una cuenta en un banco chino que se bloquearon con motivo del fraude, Grezzi precisó que la justicia china está investigando pero por el momento no hay novedades.