Cuando los sanitarios dan malos consejos

Resulta preocupante que un profesional de la salud pueda llegar a dar mensajes erróneos en cuanto a la lactancia materna. Son muchas las madres que argumentan que existe una falta de interés en algunos profesionales cuando se enfrentan a situaciones de este tipo, se preguntan por qué les importa tan poco cargarse una lactancia por puro desconocimiento, curándose en salud ante la ignorancia.

Esta semana voy a contar un caso real de una madre lactante de un bebé de menos de un mes que acudió al servicio de radiología de un hospital público de la Comunidad Valenciana para realizarse un TAC con contraste.

«Cuando he llegado el enfermero me ha preguntado si me había sacado leche para veinticuatro o cuarenta y ocho horas». Ella le contestó: «Disculpe pero… ¿el contraste que me van a poner es yodado?»

El le contestó que sí. «Entonces yo le digo que, la información que me había facilitado una profesional sanitaria especialista en lactancia y contrastada en la web de e-lactancia.org indicaba que el contraste yodado es compatible con la lactancia. Espero no estar equivocada… no quiero dármelas aquí de experta… Pero meterle unos biberones de leche de fórmula al niño durante 48 horas…» Además, «no me he sacado leche, nada más que 50 mililitros por si me rechazaba la primera toma…Disculpe que insista pero, ¿podría hablar con el radiólogo?»

Así que, le dio un teléfono fijo. «Y yo a un lado y el radiólogo al otro lado del aparato separados solo por una puerta, porque yo le escuchaba a través de ella más que por el auricular». Pero bueno, lo importante es que habló con él y le contó la historia y él le respondió: «El protocolo de aquí es que tienes que estar 48 horas sin amamantar o un mínimo de 24 horas, lo que tú decidas… Pero si decides dar el pecho al bebé no te puedo hacer el TAC con contraste, te vas y vuelves cuando dejes de dar el pecho».

En ese momento le respondió: «Pero bueno…, vamos a ver. ¿Cómo voy a volver cuándo le deje de dar el pecho? Si yo no sé cuándo voy a dejar de dar el pecho, a lo mejor pasan dos años… Entonces, le vuelvo a explicar lo que me han dicho… Entonces, le contestó: «Bueno, es que lleva yodo y más cosas, te habrán informado del yodo, pero lleva más cosas…»

Su explicación no le dejó conforme. Por lo que le contesté que en e-lactancia pone contraste yodado, pero aun así, «si a usted no le importa me puede dar el frasco de lo que me van a poner en la vena y yo miro componente a componente en e-lactancia y me aseguro».

Él le contestó que tenía cinco minutos. «Cuando me da el frasco, casualmente me cae el prospecto en los pies, y se me ocurre leerlo, e indicaba: «Embarazo y lactancia… En lo referente a la lactancia especifica que es completamente compatible, puede seguir amamantando al bebé con normalidad. Total que me dirijo al enfermero y le digo, mira ponme el contraste… bajo mi responsabilidad, no por nada, sino porque lo pone en el prospecto y por favor mándale al radiólogo una fotito del prospecto porque aquí pone que lo que estáis poniendo es compatible con la lactancia».

El enfermero le mandó una foto del prospecto al radiólogo, subrayado en verde fósforo lo de la lactancia, de este modo y gracias a la insistencia de esta madre, consiguió al fin que le hicieran el TAC.

Ahora juzguen ustedes mismos si se puede consentir que sucedan cosas como estas de profesionales a los que dejamos nuestra salud en sus manos.

Se sigue teniendo poco interés por la lactancia materna. Ante la mínima dificultad, se insta a la madre la opción de la leche artificial. Siempre se dice lo mismo, «no pasa nada», pero en realidad con acciones de este tipo lo que puede ocurrir es que una madre acabe con su lactancia y todo, por ignorancia.

Puedes enviar tu consulta a consultalactancia@larazon.es