Júcar-Vinalopó

Autorizados 4,7 hectómetros cúbicos del trasvase Júcar-Vinalopó

La captación se realizará de aguas superficiales del río Júcar en el azud de La Marquesa situado en Cullera

La Confederación Hidrográfica del Júcar autoriza el trasvase Júcar-Vinalopó en la población de Cullera.
La Confederación Hidrográfica del Júcar autoriza el trasvase Júcar-Vinalopó en la población de Cullera.larazon

La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) ha autorizado el trasvase de 4,7 hectómetros cúbicos a través de la conducción Júcar-Vinalopó para el regadío del Alto y el Medio Vinalopó, lo que supondrá un alivio para los acuíferos de la zona que se declararon como sobreexplotados en el año 2020.

Los caudales serán bombeados por Acuamed hasta el punto de encuentro de la conducción Júcar-Vinalopó con la conducción general margen derecha del postrasvase, donde comenzará la distribución a cargo de la Generalitat Valenciana.

La CHJ ha aprobado este mismo lunes el primer trasvase con el fin de mejorar los niveles piezométricos de los acuíferos, dando una solución a los regadíos de las comarcas del Alto y el Medio Vinalopó y consiguiendo reducir la afección a los pozos de abastecimiento de los municipios del interior.

La captación se realizará de aguas superficiales del río Júcar en el azud de La Marquesa situado en Cullera, lo que permitirá ser respetuosocon el caudal ecológico del Júcar y con sus ecosistemas asociados, especialmente con la Albufera.

Los beneficiarios directos de este trasvase serán la Comunidad General del Medio Vinalopó (1,33 hectómetros cúbicos), la Comunidad de Regantes Hondón de las Nieves (un hectómetro cúbico) y la Comunidad de Regantes La Romana (dos hectómetros cúbicos). A su vez, tendrán derecho a captar las entidades CR Percamp, CR Aliciri, CR Santa Bárbara de Ubeda, CR Casas Juan Blanco y CR Salinas, todas ellas integrantes de la Comunidad General del Medio Vinalopó.

Los programas de actuación para la recuperación del buen estado de las seis masas de agua subterránea declaradas en riesgo de no alcanzar el buen estado cuantitativo, por lasobreexplotación, están en fase de elaboración. Y en octubre de este año comofecha máxima deberá estar aprobado el programa de todas ellas: Sierra del Castellar, Sierra de Salinas, Sierra de Crevillente, Peñarrubia, Villena-Beneixama y Sierra del Reclot.

No obstante, hasta la aprobación de los programas se podrán adoptar las limitaciones de extracción, así como las medidas de protección de la calidad del agua subterránea que fueran necesarias como medida cautelar.

Cabe destacar que gran parte de las masas de agua subterránea de la cuenca del Vinalopó se encuentran en mal estado cuantitativo y en algunas de ellas los volúmenes de extracción superan en más de seis veces los recursos disponibles y los descensos de los niveles piezométricos son superiores a 350 metros. En valor medio, la extracción de agua duplica los recursos disponibles de las masas subterráneas.