Política

Ximo Puig incluye a Pere Aragonés en su ronda de contactos para reformar la financiación autonómica

Recibirá al presidente catalán en Valencia con el objetivo de reforzar la relación entre ambas autonomías

Imagen del presidente de Fomento del Trabajo, Josep Sánchez-Llibre, junto a Ximo Puig y Pere Aragonés
Imagen del presidente de Fomento del Trabajo, Josep Sánchez-Llibre, junto a Ximo Puig y Pere Aragonéslarazon

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, recibirá el miércoles 8 de septiembre en Valencia al presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonés. Este encuentro, según han indicado fuentes de Presidencia, se enmarca dentro de la ronda de contactos que el jefe del Consell ha abierto con otros homólogos para abordar la reforma de la financiación autonómica. El primer encuentro fue con la balear, Francina Armengol, y ya está cerrado el que mantendrá con el andaluz Juan Manuel Moreno Bonilla.

Con la cumbre con el presidente catalán, Puig pretende abordar ámbitos de colaboración y “fortalecer la relación entre ambos gobiernos”.

Concretamente, desde la Generalitat valenciana han remarcado que pondrán en común las políticas que cada Gobierno autonómico está desarrollando en materia social y económica, especialmente las dirigidas a la recuperación de la crisis generada por la covid.

En concreto, tratarán sobre la gestión de los fondos procedentes de la Unión Europea, actuaciones en materia de infraestructuras que afectan a la comunicación entre territorios, reactivación económica o financiación, además de otros asuntos de interés “para dos Gobiernos vecinos que comparten vínculos sociales, económicos y culturales”.

“Hay vida fuera de Madrid”

La Comunitat Valenciana y Baleares celebraron en julio una cumbre bilateral para analizar cómo consolidar las relaciones y los intereses que unen a ambos territorios en distintos ámbitos y reivindicar una “alianza en favor de la periferia”.

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, insistió en que con esta reunión se iniciaba una “nueva etapa” en la relación entre ambas autonomías, que ayudará a su vez a afianzar una “visión integradora, cohesionadora, de una España posible, real, diferente; una España en definitiva mejor”. “Hay vida fuera de Madrid, y sobre todo, vida inteligente”, dijo para argumentar que hay que construir España “desde abajo y desde el respeto a las diferentes identidades, pero pensando en la igualdad de las personas”.

(Seguirá ampliación)