Política

Valencia, pasaporte a Moncloa

Los populares manejan un sondeo electoral en clave autonómica que da al bloque de PP y Vox un empate técnico con las tres fuerzas que conforman el Gobierno del Botànic

El presidente del PP en Comunidad Valenciana, Carlos Mazón y el presidente del PP, Pablo Casado, durante la sexta jornada de la Convención Nacional del partido celebrada en Valencia el pasado mes de octubre
El presidente del PP en Comunidad Valenciana, Carlos Mazón y el presidente del PP, Pablo Casado, durante la sexta jornada de la Convención Nacional del partido celebrada en Valencia el pasado mes de octubreJorge GilEuropa Press

La Comunitat Valenciana es el pasaporte para llegar a Moncloa. Sobre esta frase se ha conformado la vida política de la ciudad de Valencia que, en tan solo dos semanas, acogerá los congresos nacionales de los dos principales partidos de España.

El Palau de Les Arts fue ayer el escenario donde todos los «barones» regionales, incluida la madrileña Isabel Díaz Ayuso, cerraron filas con el presidente popular Pablo Casado. Hoy celebran un acto multitudinario en la plaza de toros y en dos semanas serán los socialistas los que celebren su congreso nacional en el «cap i casal». ¿Casualidad? No, más bien se trata de números. La Comunitat Valenciana es necesaria para llegar a Moncloa, por lo que a ambos partidos les interesa reforzar su presencia en Valencia en una situación en la que ninguno de los dos tiene la victoria asegurada.

En el PPCV manejan datos que les aseguran que se está produciendo un cambio de tendencia. Un sondeo electoral realizado hace apenas 15 días confirma que los bloques de derecha e izquierda están en un «empate técnico».

Este «tracking electoral» que se diferencia de una encuesta porque va actualizando de manera periódica y permite, por tanto, marcar tendencias, prevé de 48 a 50 escaños para el bloque del actual Botànic (PSPV, Compromís y Unides Podem) y de 49 a 51 escaños para el PP y Vox porque Ciudadanos, según este estudio, no llegaría al cinco por ciento de los votos necesarios para entrar en el Parlamento valenciano.

En el bloque de la derecha la subida se produce a pesar del descalabro de Ciudadanos que pasaría de 18 a cero escaños. Sus votantes se dividen entre apoyar al PP, que pasaría de 19 diputados a una horquilla de entre 27 a 30 y Vox que registra la subida más espectacular y dobla sus 10 escaños pudiendo llegar incluso a los 21.

En el Botànic, este «tracking» da de 27 a 30 escaños para el PSPV (hoy tiene 27), hasta tres menos para Compromís, pasando de los 17 actuales a 14 ó 15 y Unides Podem que baja solo un diputado y se queda en 7.

Los análisis que hacen desde el PP son optimistas. La tendencia es buena y confían en que el cambio de Gobierno es posible. Eso sí, saben que su socio natural tiene que ser Vox, un partido que, aún sin tener una cara conocida en la Comunitat Valenciana, sigue subiendo con especial importancia en ciudades como Alicante o Valencia.

La estrategia para el PP con su potencial socio de Gobierno se perfila complicada. No obstante, los populares apuntan a que su partido tiene suficiente bagaje como para hacer la campaña por su cuenta sin pensar en lo que pueda estar haciendo Vox.

«Cansada de esperar»

El presidente del PPCV, Carlos Mazón, intervino ayer durante la convención del PP en una mesa junto a otros presidentes regionales que, como él, se encuentran en la oposición. Son el grupo denominado «La alternativa necesaria». El también presidente de la Diputación de Alicante, insistió ayer en que quien más necesita al PP es la Comunitat Valenciana. «Lo necesita mi tierra y como ha quedado bien claro durante este congreso, los populares ponemos la tierra por delante de nuestro propio partido. Buscamos prosperar, que ya está bien del ninguneo» e insistió en que «el futuro de España se escribe desde Valencia».

No obstante, Mazón destacó que los populares hacen compatible la defensa de las autonomías con la unidad nacional. «Eso solo lo hace el PP. «Solo el PP lucha por la valencianía y también por España» y remarcó que la Comunitat Valenciana nunca será un anexo de lo que algunos llaman Països Catalans.

Mazón insistió en que la Comunitat Valenciana está cansada de esperar y reivindicó ante Casado la necesidad de garantizar el agua necesaria, mejorar la financiación autonómica y paliar el déficit de infraestructuras que sufre la Comunitat Valenciana, especialmente después de la gestión del ministro valenciano de Transportes, José Luis Ábalos.