Sociedad

Pablo Broseta: “Mi padre reclamaría responsabilidad para grandes acuerdos políticos”

Ximo Puig reivindica los valores de la Ilustración y el republicanismo cívico

El president de la Generalitat, Ximo Puig, participa en una nueva edición de 'Diàlegs al Palau', donde conversará con el presidente de la Asociación de Amigos de la Fundación Profesor Manuel Broseta, Pablo Broseta.
El president de la Generalitat, Ximo Puig, participa en una nueva edición de 'Diàlegs al Palau', donde conversará con el presidente de la Asociación de Amigos de la Fundación Profesor Manuel Broseta, Pablo Broseta.GVAGVA

Pablo Broseta, hijo del catedrático Manuel Broseta, asesinado por ETA hace 30 años, ha manifestado que hoy en día su padre reclamaría responsabilidad para alcanzar grandes acuerdos políticos en beneficio de un buen gobierno y del beneficio general.

El presidente de la Asociación de Amigos de la Fundación Profesor Manuel Broseta se ha pronunciado así durante una nueva edición de “Diàlegs al Palau”, junto al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, donde ambos han conversado de varias cuestiones un día antes del trigésimo aniversario del asesinato por ETA del profesor Broseta en València.

Sobre la juventud, Pablo Broseta ha defendido que la violencia machista, que ha calificado de “pandemia casi como la del coronavirus” con una mujer asesinada cada semana, y otros problemas como el terrorismo islamista deben ser abordados, para que no se vuelvan a repetir, desde la educación de los jóvenes.

Ximo Puig ha reivindicado los valores de la Ilustración, del “republicanismo cívico”, para que los jóvenes tengan la capacidad de entender el mundo “sin las barreras que genera el fanatismo”.

La polarización política actual ha centrado una de las temáticas de la conversación, en la que el presidente de la Generalitat ha asegurado que la “futbolización” de la política es “un desastre” y la sociedad acaba situándose en “un maniqueísmo ridículo”, y por ello considera exigible a los partidos políticos, a sus dirigentes y a quienes tienen responsabilidad institucional que “no idioticen” el mensaje.

Al mismo tiempo, ha alertado de que raquitizar el debate tiene consecuencias que se pueden ver en el crecimiento de movimientos populistas y extremistas, y ha insistido en reivindicar la Ilustración, el parlamentarismo y la democracia como “el único camino”.

Pablo Broseta se ha pronunciado en el mismo sentido al afirmar que debemos exigir una clase política responsable, que minimice tensiones, pues muchas veces se asiste a “enfrentamientos artificiales”.

En su opinión, no debe ser tan complicado alcanzar grandes acuerdos en beneficio de la inmensa mayoría de los ciudadanos, pero se “marca” a quien se sale del tiesto desde su libertad individual cuando es un posicionamiento tan legítimo como el de la gran masa.

Los políticos deben defender lo que cada uno cree que debe defender, una idea “muy Broseta”, ha dicho, y trabajar por los valores en los que cree, aunque estas posiciones no se toman actualmente como una crítica constructiva sino como voces “críticas e incómodas”.

Sobre el relato de lo que ha supuesto ETA en España, Broseta ha afirmado que la situación de hoy se la debemos, entre otros, a las personas que se comprometieron y pagaron con su vida, una memoria que los jóvenes deberían conocer.

Broseta ha agradecido al Gobierno de la Generalitat y a su presidente el apoyo y cariño mostrado hacia las familias de las víctimas de ETA, pero ha asegurado que a estas les cuesta entender tener un gobierno central apoyado por separatistas, independentistas y partidos opuestos a lo que fue el Régimen del 78.

Así, ha insistido en el consenso y el diálogo en pro del buen gobierno, algo que le habría gustado que hubieran trabajado los grandes partidos. Y ha recordado que su padre era “un gran escuchador” y proponía siempre ponerse “al otro lado de la mesa”.

En una conversación con su padre, ha recordado, unos meses antes de ser asesinado, le hizo reflexionar sobre la solución a los atentados de ETA: “Si hiciéramos eso -matar a los asesinos- seríamos como ellos, y además no acabaríamos con esto”.

Puig ha considerado que debemos tener presente en la conciencia colectiva la huella del terrorismo para no traicionar la memoria de los asesinados y “nuestra dignidad”.

Para concluir, Broseta ha recordado unas palabras que su padre decía a sus hijos: “Vida hay una, tenéis la obligación de ser felices y hacer felices a vuestro entorno, y devolver a la sociedad lo que nos brinda”.