Causa Imelsa

Dos acusados de Imelsa explican cómo cobraban facturas falsas

Uno de ellos fue contratado “como premio” por Imelsa sin desempeñar tarea alguna

José Estarlich, imputado de la primera de las piezas de la causa Imesla, cuya vista ha comenzado hoy, ha explicado como a través de la empresa Berceo emitía facturas falsas por trabajos no realizados a la entidad pública Imelsa, cuando su gerente era el “yonki del dinero”, Marcos Benavent, en el año 2009

Estarlich era el marido de la secretaria de Benavent, y pidió su ayuda después de varios reveses económicos y de que una empresa le devolviera pagarés. De este modo, Benavent le propuso ser administrador de Berceo “porque él era cargo público y no podía aparecer”.

Ha explicado que Berceo no tenía ningún trabajador. “No realicé ningún tipo de trabajo real. Todas las facturas de Berceo eran irreales. No respondía a ningún trabajo”. Sin embargo, ha añadido que “se hacían facturas falsas o engordadas y el dinero iba a las cuentas de Berceo para su utilización”. Estarlich ha dicho que “nadie me fiscalizó porque yo hablaba directamente con Marcos. Benavent utilizaba el dinero que se ingresaba en la cuenta de Berceo.

También ha dicho que con ese dinero de la facturación falsa “se compró un apartamento en Jávea adosado a uno que ya había comprado Marcos y quería unirlos”. Berceo pidió el crédito y lo iba a pagando. Pero “tuve que venderlo porque llegó un momento que ya no podía pagar todo porque Benavent ya no trabajaba en Imelsa. El dinero lo dejé en las cuentas”.

Estarlich, que solo ha contestado a las preguntas del ministerio fiscal, con quien ha llegado a un acuerdo, ha admitido también que “como premio fui contratado en Imelsa sin realizar ningún tipo de trabajo”.

Por su parte, otro de los imputados, Francisco Javier Márquez Suárez, consejero delegado de la empresa Cyan Animática, ha declarado que en 2011 le llama García Barat, de Thematica Events, y le pide presupuesto para una producción en el Muvim. Su empresa realiza el trabajo y cobra quince mil euros por adelantado de un importe total de 30.000. Cuando pide el pago de los otros 15.000 euros, Barat le pide que se los facture a Imelsa y que además, le facture 41.000 euros más, algo que hace y de lo que se ha mostrado engañado y arrepentido. “Yo no sabía que Imelsa era una empresa pública y además, mi empresa atravesaba un mal momento”.

Márquez, que también ha alcanzado un acuerdo con la Fiscalía, solo contestó las preguntas del Ministerio público, y ya ha devuelto 20.000 euros para reparar el daño.

Factura de Medina

Por otra parte, en las cuestiones previas, el abogado que representa al exvicepresidente de la Diputación de Valencia, Juan José Medina, ha aportado la documentación bancaria de la forma de pago de las facturas de los actos electorales en la campaña electoral de 2007 y que según ha explicado, los sufragaban los propios concejales. Nueve facturas de entre 1.200 o 1.400 euros, según ha indicado