Arte

Arrestan a dos activistas en el Louvre tras atacar "La libertad guiando al pueblo"

Dos personas del grupo activista Riposte Alimentaire han sido acusados de "daño intencional" contra la icónica obra de Delacroix

«La libertad guiando al pueblo», de Delacroix
«La libertad guiando al pueblo», de DelacroixMuseo del Louvre

Siguen dándose amenazas en el cuidado de las obras de arte más icónicas de los principales museos. El activismo continúa tomando la pintura clásica como objetivo de sus protestas, lo que ha hecho que se refuercen las medidas de seguridad y prevención de ataques. Son muchas las obras que ya han sido atacadas, arrojando pintura, comida o pegamento. Ahora, ha vuelto a ocurrir algo parecido en el Louvre, pero esta vez han podido cogerlo a tiempo. Han arrestado a dos activistas del grupo ecologista Riposte Alimentaire, tras realizar una protesta este miércoles ante el icónico cuadro de Eugène Delacroix "La libertad guiando al pueblo" (1830).

Los vídeos e imágenes del grupo, también conocido como Food Reponse, se publicaron en redes sociales, y aparecían los activistas pegando carteles y pegatinas alrededor del cuadro de Delacroix. En ellas, aparecía escrito "Resistir es vital". Afortunadamente, todo fue alrededor del cuadro, por lo que no hubo daños directos. Ambos activistas, mientras realizaban esta protesta alrededor de la pintura, recientemente restaurada, coreaban sus advertencias sobre la necesidad de seguridad para una alimentación sostenible.

El grupo activista forma parte de una coalición de organizaciones de protesta conocida como A22. En ella, se incluyen Extinction Rebellion y Just Stop Oil, entre otras, grupos conocidos pues sus miembros también han atacado en otras ocasiones obras de arte arrojando comida o pintura. En el caso de Riposte Alimentaire, ambos individuos han sido acusados de "daño intencional", así como un representante del Louvre ha presentado una denuncia ante la policía, según asegura "Le Monde".

Afortunadamente, la obra de Delacroix no sufrió ningún daño. Acaba de volver al museo, el pasado dos de mayo, tras someterse a seis meses de restauración. Una pintura que, en palabras del propio museo, se trata de "probablemente la pintura más famosa del Louvre después de la Mona Lisa".