Del tribunal a la tumba

Los guantes ensangrentados de OJ Simpson: las respuesta a un enigma que dura 30 años

La ex estrella de la NFL fallecía ayer a los 76 años tras una dura lucha contra el cáncer. Los secretos tras la escena más famosa de la historia judicial permanecen.

La mejor actuación de OJ Simpson
La mejor actuación de OJ SimpsonTwitter

OJ Simpson, ex legendario running back de los Buffalo Bills y uno de los mejores jugadores en su posición durante la década de los 70, falleció ayer a los 76 años tras una larga lucha contra el cáncer. Pese a su desempeño en la cancha siempre será recordado por el juicio más mediático de todos los tiempos y sobre todo por la icónica imagen de los guantes que ha pasado a formar parte de la historia judicial.

En 1994, fue acusado de asesinar a su segunda esposa, Nicole Brown, y al amigo Ronald Goldman, quienes aparecieron fuera de la vivienda de su ex mujer. Ella decapitada, con los ojos morados y los labios rotos. Él, golpeado y apuñalado 19 veces. El Juicio del Siglo, como se lo conoció mediáticamente, se estiró desde enero de 1995 hasta octubre de ese mismo año. Con pruebas en su contra, contrató un equipo de abogados y, después de varios juicios, en 1995 fue declarado inocente a pesar de que los testigos aseguraban que era un hombre violento y celoso. Se llegaron a registrar varios llamados de la mujer al 911 por maltratos.

Para el recuerdo siempre quedará la mítica imagen de Simpson probándose los guantes ante el jurado y el tribunal el 15 de junio de 1995. Una actuación de Oscar que le permitió seguir libre pero sobre todo un misterio que sigue sin resolverse trres décadas después.

El Pueblo contra O. J. Simpson fue el nombre del caso que llevó al Estado de California a acusarlo por el doble crimen de su ex esposa, Nicole Brown Simpson, y su amigo, Ronald Goldman, quienes fueron apuñalados en el patio frontal de la casa que la mujer tenía en Brentwood, al oeste Los Ángeles. Entre las evidencias encontradas en la escena se destacó un guante ensangrentado cuyas manchas pertenecían a ambas víctimas, según confirmó posteriormente un análisis de ADN.

La estrella de la NFL fue arrestada el 17 de junio de 1994 tras una persecución policial que fue seguida por las cámaras de televisión y que obligó, por única vez en la historia, a interrumpir una final de la NBA. Se estima que 95 millones de personas siguieron en directo el intento de OJ para escapar de su detención pero lo mejor aún estaba por llegar.

El Juicio del Siglo, como se lo conoció mediáticamente, se estiró desde enero de 1995 hasta octubre de ese mismo año, pero la fecha clave para entender su desenlace fue el 15 de junio: el día de los guantes. La fiscalía estaba convencida de que aquel par de guantes darían la puntilla al deportista pero nunca imaginaron la actuación que tendrían que presenciar.

Las hipótesis

Con aquella prueba que parecía rrefutable, el 15 de junio, el fiscal Chris Darden, afroamericano y apuntado como traidor por parte de la sociedad afroamericana, que creía en la inocencia de Simpson, le pidió a O.J. que se pusiera los guantes en el tribunal. Y entonces miles de personas vieron a través de la TV cómo el exdeportista se intentaba poner el guante en su mano izquierda y, con una sonrisa, mostró a todos que no le entraba. "Demasiado apretados", soltó tras probarse también el derecho. Allí saltó el abogado que encabezaba la defensa y exclamó: "Si no encaja, debe absolver". Una frase que quedó grabada para la historia.

Uno de los abogados de Simpson reconoció tiempo después en una entrevista que él se había probado el guante y le dio la tranquilidad a O.J. de que se lo pusiera, porque no había posibilidades de que le entrara en su mano.

Hoy en día, 30 años después, muchos se siguen preguntando por qué los guantes no le entraron en sus manos con normalidad, lo que derivó en un montón de versiones y especulaciones.

La jugada más brillante jamás vista en un tribunal

El fiscal siguió sosteniendo en entrevistas posteriores que los guantes en realidad si le entraban, y estaba convencido que eran de O.J: “Pero fue una gran imagen para la defensa y fue una gran actuación de O.J.”, expresó, además de apuntarle tiempo después al abogado de Simpson, acusándolo de haber roto los revestimientos de los guantes para que los dedos de Simpson nunca llegaran a posicionarse bien. Lo cierto es que el fiscal reconoció después en una autobiografía que se equivocó al pedirle a OJ que se pusiera los guantes en el tribunal. “Creo que todo el asunto del guante fue la jugada más brillante en la sala del tribunal penal en la historia de la jurisprudencia estadounidense”, sostuvo en el programa de televisión norteamericano TODAY

Otra teoría revelada años después del juicio asegura que O.J. padecía artritis y no había tomado la medicación, por lo que sus articulaciones se hincharon por eso y las manos se inflamaron.

La fiscal Marcia Clark defendió otra hipótesis: los guantes de látex que se usaban debajo de los de cuero para no contaminarlos pudieron haber provocado mayor fricción y por lo tanto arruinado el ajuste, afirmó en la BBC.

En 2012, un hombre llamado Clay Rogers aseguró que el asesino fue su hermano, Glen, quien ya le había anticipado a su familia que iba a asesinar a Nicole Brown, algo que claramente sus padres pasaron por alto. Glen fue detenido en 1995 por el asesinato de cinco mujeres y en la cárcel le aseguró a un analista criminal que efectivamente fue él quien asesinó a la exesposa de Simpson y su amigo, por encargo de O.J., dando incluso detalles de cómo lo hizo.

La respuesta al enigma judicial más cacareado de la historia quedó enterrada ayer junto al histórico jugador de la NFL.