Presupuestos

El Gobierno admite su “error” y no subirá el diésel a cambio del apoyo del PNV a sus Presupuestos

Montero consigue superar el primer examen parlamentario, después del rechazo por el pleno del Congreso a las enmiendas a la totalidad de las cuentas de 2021

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, conversa con el portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique (d), en el Congreso este jueves durante la segunda jornada de debate a la totalidad de los Presupuestos de 2021.
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, conversa con el portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique (d), en el Congreso este jueves durante la segunda jornada de debate a la totalidad de los Presupuestos de 2021.Chema MoyaEFE

Al filo de la una del mediodía, ha concluido este jueves el debate sobre las siete enmiendas a la totalidad presentadas a las cuentas públicas de 2021. Esta segunda jornada ha transcurrido sin excesivas novedades. El pleno del Congreso de los Diputados ha rechazado por 198 votos en contra, 150 a favor y ninguna abstención las enmiendas a la totalidad. Al término de la votación, la ministra de Hacienda no ha podido ocultar su emoción por conseguir que sus cuentas superen con éxito el primer examen parlamentario. Por eso, más que nunca, el Gobierno está dispuesto a ceder en todo aquello que sea necesario para conseguir la puesta de largo de sus Presupuestos Generales del Estado en enero de 2021. Con este objetivo en mente, María Jesús Montero ha tendido la mano este jueves durante el debate a todos los grupos parlamentarios que permitieron la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Ejecutivo. Una vez más, ha dejado la puerta abierta a negociar con el PNV y con Ciudadanos la subida impositiva del diésel. Para el Gobierno, esta subida no supondrá ningún obstáculo para cerrar un acuerdo presupuestario con su socio estable, el PNV.

Es más, a la ministra no le cabe la menor duda de que ese acuerdo con los nacionalistas vascos será posible. Pese a su declaración de intenciones, para que no quepa la más mínima duda ha confesado su “error” al no comprender que para el PNV esta subida impositiva, con la que el Gobierno prevé recaudar 450 millones en 2021, “era una línea roja”. Como no podía ser de otra manera, la rectificación de la portavoz del Ejecutivo ha sido bien recibida por la bancada de los nacionalistas vascos . De hecho, la diputada del PNV, Idoia Sagastizabal, "se ha alegrado” de que esté dispuesta a abrir el debate sobre el alza del diésel. Los nacionalistas vascos, al igual que Ciudadanos, consideran que no es el momento adecuado para subir la presión fiscal. No obstante, el PNV apoya la convergencia con Europa y la transición energética y defiende que descarbonizar “no solo es electrificar y desindustrializar”, sino que la transformación de la movilidad debe hacerse con una “política industrial innovadora y sostenible”.

Por tanto, con toda seguridad, el Gobierno renunciará a este aumento en aras a conseguir el respaldo del PNV y Cs a las cuentas públicas de 2021. El celo empleado por Montero por intentar agrada a todos los grupos parlamentarios que apoyaron la investidura de Sánchez en busca del consenso en torno a sus Presupuestos se debe a que estas cuentas son imprescindibles no sólo para España para sentar las bases de la recuperación y conseguir el anticipo de 27.000 millones de euros de los fondos europeos para la reconstrucción postcovid-19, sino también para la permanencia en el poder del PSOE y de Unidas Podemos.

En este contexto, al Ejecutivo no le dolerán prendas en dar marcha atrás al incremento de la fiscalidad del diésel, aunque España sea el tercer país con el precio del diésel más bajo, detrás de Lituania y Luxemburgo. Circunstancia con la que el Gobierno “no se siente cómodo”. De ahí que Montero haya defendido avanzar en la transición energética para aumentar la competitividad empresarial y seguir trabajando en la fiscalidad. Pero, según todo parece, este discurso se quedará en pura retórica. La ministra se ha encargado de calmar los ánimos de los nacionalistas vascos y les ha trasladado “tranquilidad” respecto a su intención de renunciar a este aumento fiscal.

Y es que, según Sagastizabal, el Gobierno acordó con su grupo frenar la subida del diésel en conversaciones previas a la presentación de las cuentas, así como dejar de lado un eventual alza del IVA de la Sanidad y Educación privada. “Arrimadas deje de ponerse medallitas. Algunos sabemos lo que pasó con este tema”, ha añadido la diputada vasca, en referencia a la presidenta de Cs, que hace unas semanas desvelo que había pactado con La Moncloa la retirada de este incremento fiscal a cambio de su apoyo a los Presupuestos. El PNV tampoco ve con buenos ojos la subida del IVA a las bebidas azucaradas. “No creemos que cambie por sí sola hábitos de consumo”, pese de compartir la preocupación por la obesidad.

Montero ha recogido el guante lanzado por la diputada vasca, que ha criticado la incertidumbre sobre la llegada y reparto de los fondos europeos. La ministra de Hacienda ha anunciado que en las próximas semanas se reunirá con los responsables autonómicos para explicar los criterios de reparto de los fondos europeos y ha asegurado cogobernanza para implicar a las comunidades en la gestión de los mismos. Además, ha desvelado que el decreto ley para agilizar los procedimientos llegará en breve al Congreso de los Diputados.