Encuesta

Seis de cada diez españoles cree que recibe del Estado menos de lo que paga en impuestos y cotizaciones

Nueve de cada diez denuncia que hay mucho fraude fiscal y que el Gobierno hace poco por evitarlo

Vista de una sede de la Agencia Tributaria
Vista de una sede de la Agencia TributariaEmilio NaranjoEFE

Los españoles mantienen su preocupación sobre las prestaciones y los servicios que revierten de la Administración sobre la ciudadanía. Y así se ha puesto de manifiesto en el estudio anual ‘Opinión pública y política fiscal’ realizado por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). Entre sus conclusiones está que un 61% de los españoles cree que recibe menos de la Administración de lo que paga en impuestos y cotizaciones, un 30,2% cree que recibe más o menos lo que paga y solamente un 5,5% cree que recibe más de la Administración de lo que paga. Además, el 77,2% de los contribuyentes considera que los impuestos no se cobran de manera justa, que no pagan más quienes más tienen. Solo el 15,5 % de los encuestados sí que opina que los impuestos se cobran con justicia, aunque a la hora de pagar el 49,2 % cree que los españoles son poco conscientes y responsables.

El informe anual, que supone la edición número 37, resalta que el 89,9 % de los contribuyentes cree que existe mucho o bastante fraude fiscal, frente al 5,8% que considera que existe poco o muy poco. Además, más del 90% cree que en España existe mucho o bastante fraude fiscal. La encuesta también indica que el 52,4 % de los contribuyentes considera que la sociedad se beneficia poco de lo que se paga a las Administraciones Públicas, mientras solo el 29,9 % cree que la sociedad se beneficia bastante. Casi la mitad de los encuestados cree que paga muchos impuestos en España, mientras que un 40,2% ve regular lo que paga de impuestos y casi un 10% piensa que es poco.

En sus respuestas, un 81,4% de los encuestados señaló que los impuestos no se cobran con justicia y que no pagan quienes más tienen; un 46,2% considera que los españoles pagan mucho en impuestos, y un 58,6% sostiene que, teniendo en cuenta los servicios públicos y prestaciones sociales existentes, la sociedad se beneficia poco o nada de lo que se paga en impuestos y cotizaciones. Un 84,1% contestó que la Administración hace pocos o muy pocos esfuerzos para explicar el destino de los impuestos, frente a un 11,1% que respaldó el trabajo realizado por los poderes públicos al respecto.

Por otro lado, un 17,2% de los españoles considera muy o bastante probable que Hacienda realice una revisión de su declaración de la renta del 2020; un 79,6% de los españoles afirma haber realizado la declaración de la renta de este curso y, por el contrario, un 15,5% indica no haber tenido obligación de hacerla. Tan solo un 4,7% respondió que no había realizado la declaración sin precisar si había o no obligación. Cuestionados por la probabilidad de sufrir una revisión de la declaración de la renta, un 17,3% de los españoles considera que es muy o bastante probable que puedan sufrir dicha revisión. En cambio, un 38,6% consideran poco probable y un 33,6% nada probable que esto ocurra.

Sobre el resultado de la declaración, uno de cada tres españoles -34,6%- que la realizaron indican que les salió a pagar y, por tanto, han abonado a Hacienda la cantidad correspondiente, mientras que un 58,7% de los encuestados han afirmado que les salió a devolver. Un 5,3% afirman, en cambio, que no les salió ni a pagar ni a devolver. Respecto a qué casilla marcaron para destinar parte de sus impuestos, un tercio (33,6%) tachó la casilla de fines sociales, mientras que un 11,4% hizo lo propio con la casilla de la Iglesia. Hasta un 18,8% afirmó haber señalado ambas casillas, mientras que algo más de uno de cada cuatro españoles -26,4%- reveló no haber marcado ninguna.

Pese a una percepción generalizada del fraude, los encuestados creen que la gran parte de personas que conoce declara realmente todos sus ingresos al hacer la declaración de la renta (un 75,9% respondió que toda, casi toda o bastante), frente a un 16,6% que cree que poca gente, o directamente ninguna, cumple con sus obligaciones. Ante la pregunta de si se considera consciente y responsable a la hora de pagar impuestos, casi un 92,7% se ve a sí mismo bastante o muy consciente y responsable. La misma pregunta, pero referida al conjunto de los españoles, deja como resultado que un 62,9% cree que son poco o nada conscientes y responsables, frente a un 33% que cree lo contrario.

Preguntados por su tolerancia ante distintos tipos de fraude, un 96,4% rechaza recibir una prestación social a la que no se tiene derecho; un 94% considera poco o nada tolerante que una gran empresa eluda o evite pagar el Impuesto de Sociedades; y un 88,4% que una pequeña empresa eluda o evite pagar Sociedades.

Menos rechazo, aunque mayoritario igualmente, recibe montar una empresa que opere solo en Internet para pagar menos impuestos (62,9%), pagar sin factura una reparación doméstica para evitar abonar el IVA (75,9%), ser autónomo y no cobrar el IVA (80,2%), y ser autónomo y deducirse gastos personales como gastos de empresa que no corresponden (86,4%).

Los encuestados también señalaron como principales efectos del fraude fiscal la creación de injusticias (34%), la disminución de recursos para financiar servicios públicos y prestaciones (27,4%) y desmotiva a aquellos que son cumplidores (18,1%). Además, constatan un aumento de la presión fiscal de los que pagan correctamente (13,7%). Solo un 1,1% respondió que el fraude fiscal no tiene efectos realmente importantes.

Asimismo, un 88,1% afirmó estar de acuerdo con que “engañar a Hacienda es engañar al resto de los ciudadanos”, un 68,2% comparte que “si la gente no engaña más es por miedo a una revisión” y un 50,5% apuntó que “casi todo el mundo engaña algo al pagar sus impuestos y que la Administración cuenta con ello”. También destaca que el 91,5% censuró que la frase que decía que “en realidad no está mal ocultar parte de la renta, porque eso no perjudica a nadie”.

Respecto a la frase que mejor refleja su opinión sobre los impuestos, la elección preferida de los encuestados es que “son necesarios para que el Estado pueda prestar servicios públicos” (59,2%), por delante de un 23,2% que cree que “son algo que el Estado obliga a pagar sin saber muy bien a cambio de qué” y un 13,% que los encuadran como “un medio para redistribuir mejor la riqueza en la sociedad”.

Respecto a la financiación de los servicios públicos, las personas encuestadas señalan la investigación en ciencia, sanidad, ayuda a personas dependientes y vivienda como servicios a los que se dedican muy pocos recursos. Más del 60% de encuestadas considera que se le dedican muy pocos recursos. Entre los servicios a los que se dedican demasiados recursos, únicamente Defensa superó el 10% de personas: un 30,4% criticó que se dedican a la misma demasiados recursos. En sus respuestas, las personas encuestadas creen mayoritariamente que el sistema fiscal debe apoyarse en impuestos directos, según la renta o la riqueza de personas y empresas (un 65,2%) frente a impuestos indirectos que afectan a todos por igual (20,9%).

El estudio se ha realizado sobre la base de 2.849 entrevistas realizadas entre el 21 y el 29 de julio de 2021 a personas mayores de 18 años de 1.007 municipios y 50 provincias. Los cuestionarios se han aplicado mediante entrevista telefónica asistida por ordenador.