Energía

Berkeley propone suplir el uranio ruso en dos años con la mina de Salamanca

La compañía australiana insiste en negociar con el Gobierno para solucionar el veto a la explotación

Mina de uranio a cielo abierto de Retortillo
Mina de uranio a cielo abierto de RetortilloTwitterLa Razón

Berkeley no se da por vencida. A pesar de que el Gobierno ha vetado su proyecto para abrir una mina de uranio en Retortillo (Salamanca), la compañía australiana insiste en tender la mano al Ministerio de Transición Ecológica para poder desarrollar una explotación que, según sus cálculos, podría acabar con la dependencia española del uranio ruso en apenas un par de años.

Según ha explicado hoy martes en un comunicado, Berkeley tiene "el potencial de construir sus instalaciones en Retortillo en menos de 24 meses y, en este corto periodo, la mina supliría totalmente la importación de uranio procedente de Rusia e incluso de otros países con gran inseguridad jurídica". Nuestro país, según datos de 2021 publicados por la Empresa Nacional de Uranio (Enusa) citados por Berkeley, importa un 29,1% de uranio de Rusia, un 34,4% de Kazajistán y un 14,6% de Uzbekistán, además de un 12,6% de Canadá y un 9,3% de Níger.

Además de garantizar y apoyar la independencia energética nuclear de España (del consumo total de energía en España, el 20% procede de la nuclear), el proyecto de Berkeley permitiría cubrir la totalidad del combustible para las centrales nucleares españolas durante los próximos veinte años, según Berkeley. "Si el proyecto fuese revisado y se tuvieran en cuenta las aclaraciones que se han proporcionado al Ministerio, al estar técnicamente completado y financiado, podemos garantizar la independencia energética de uranio para el suministro de las centrales nucleares nacionales, que con la Ley actual estarán activas hasta 2035", según explica Francisco Bellón, presidente de Berkeley Minera España. Las centrales nucleares españolas consumen 1.260 toneladas de uranio en un año, lo que supone la compra de uranio por valor de aproximadamente 145 millones de dólares. Berkeley puede abastecer este consumo en 2026.

Veto ideológico

Según la World Nuclear Association, la energía procedente de centrales nucleares es fiable y resistente, gestionable 24 horas al día, siete días a la semana y totalmente independientemente de las condiciones meteorológicas o de la hora del día. Asimismo, la Comisión Europea la reconoce como energía verde, por lo que Francisco Bellón asegura que “la decisión de vetar el proyecto de Retortillo es una cuestión meramente ideológica. No hay ninguna justificación, ni siquiera técnica o medioambiental”. La compañía ha asegurado que está dispuesta a colaborar y mantiene la esperanza de que la controversia pueda resolverse de forma amistosa mediante rápidas negociaciones.

De momento, la disputa entre Berkeley y el Gobierno ha llegado a los tribunales. La compañía presentó el mes pasado un recurso contencioso ante la Audiencia Nacional después de recibir la notificación formal por parte del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico del rechazo de un recurso previo en que el Gobierno denegaba a la minera la autorización para su planta de uranio en Retortillo. La desestimación por parte del Ministerio del recurso contencioso-administrativo dio por concluido el proceso, pese que, de acuerdo con la legislación española, Berkeley ha presentado ahora un nuevo recurso para "seguir defendiendo su posición". En opinión de la compañía, el Ministerio ha desestimado la solicitud de su proyecto para Retorrillo y el recurso administrativo "sin seguir el procedimiento legalmente establecido", sin tener en cuenta los distintos 'Informes de Mejora' que complementaron la solicitud inicial, lo que implica, según la empresa, que el rechazo "no es legal".

La Audiencia puede no ser la última parada del contencioso legal iniciado por Berkeley. La compañía también sopesa la opción de recurrir a un arbitraje internacional para defender sus derechos en un proyecto en el que asegura que ha invertido ya más de 100 millones de euros.