Sin sorpresas

La FED mantiene los tipos en el 5,5% y avisa: seguirán altos hasta que la inflación sea baja de forma sostenida

La Reserva Federal de Estados Unidos prolonga la congelación acordada en septiembre

Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos
Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal de Estados UnidosCarolyn KasterAgencia AP

Cumpliendo las previsiones de los analistas, la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) ha decidido tras su reunión de octubre mantener los tipos de interés en la horquilla de entre el 5,25% y el 5,5%, su máximo nivel desde 2001; al tiempo que ha asegurado que "el Comité seguirá evaluando información (económica) adicional" para "determinar el alcance de un endurecimiento adicional de la política". De esta manera, los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés), el órgano de la FED encargado de decidir si se suben o no los tipos, prolongan la congelación que acordaron en septiembre. La FED llevó a cabo once subidas consecutivas de tipos hasta que en junio decidió pisar el freno y hacer una primera pausa a la que siguió una posterior subida en julio y la nueva congelación de septiembre que ahora se mantiene.

La FED ha decidido mantener inalterados los tipos después de constatar que "los indicadores recientes sugieren que la actividad económica se expandió a un ritmo fuerte en el tercer trimestre. El aumento del empleo se ha moderado desde principios de año, pero sigue siendo fuerte, y la tasa de desempleo se ha mantenido baja", según explica en la nota en la que ha informado de su decisión, en la que, no obstante, reitera que "la inflación sigue elevada". A este respecto, el presidente de la FED, Jerome Powell, ha advertido de que los tipos seguirán altos el tiempo necesario hasta que la inflación se reduzca hasta su objetivo del 2% y siga siendo baja de forma sostenida.

La mayor economía del mundo creció más de lo esperado durante el tercer trimestre, cuando registró una expansión del 1,2% respecto del segundo trimestre, cuando el PIB había crecido un 0,5%. En cuanto a los precios, la tasa de inflación interanual se situó en septiembre en el 3,7%, repitiendo la subida de agosto, mientras que la tasa subyacente, que excluye el impacto de la volatilidad de los precios de los alimentos y de la energía, alcanzó el 4,1%, dos décimas menos que en agosto. Asimismo, el índice de precios de gasto de consumo personal, la estadística preferida por la FED para monitorizar la inflación, se situó en el 3,4% interanual en septiembre, invariable desde agosto, mientras que el dato subyacente cerró el noveno mes de 2023 con un incremento del 3,7%, una décima menos que el mes anterior.

El organismo también añade que el sistema bancario estadounidense "es sólido y resistente". No obstante, asegura que "es probable que las condiciones financieras y crediticias más estrictas para los hogares y las empresas afecten a la actividad económica, la contratación y la inflación".

En cuanto a los próximos pasos que pueda dar, la Reserva Federal asegura que al determinar el alcance de un endurecimiento adicional de la política que puede ser apropiado para devolver la inflación al 2%, "el Comité tendrá en cuenta el endurecimiento acumulativo de la política monetaria, los retrasos con los que la política monetaria afecta la actividad económica y la inflación, y las consecuencias económicas y financieras". La FED asegura que estaría preparada "para ajustar la postura de la política monetaria según corresponda si surgen riesgos que puedan impedir el logro de los objetivos".