Desempleo
¡Vamos a contar parados, tralará!
El paro, en junio, se redujo en 50.268 personas, sin embargo, los datos desestacionalizados de la Seguridad Social indican que se han destruido 20.100 empleos
Winston Churchill (1874-1965) se jactaba de que «solo me fío de las estadísticas que yo mismo he manipulado». La cita es apócrifa, pero sus forofos menos leídos la utilizan con frecuencia. La todavía «vice» Yolanda Díaz y el inefable ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, no manipulan, por supuesto, las estadísticas, aunque las conocen por anticipado y las interpretan según su conveniencia. Escrivá, además, es como un indicador económico viviente. Cuando los datos son buenos siempre se le escapa un adelanto. Cuando no dice nada, lo que ocurre es que las cifras no son las que esperaba. Es lo que ha sucedido ahora con el paro, el empleo y las afiliaciones a la Seguridad Social (SS). El paro, en junio, se redujo en 50.268 personas y se queda en 2,68 millones, la cifra más baja desde septiembre de 2008. Al mismo tiempo, también hubo 55.000 nuevos afiliados a la SS, para un total de 20,87 millones, nuevo máximo histórico.
El Gobierno –es normal, humano y político– se ha apresurado a lanzar las campanas al vuelo y a apuntarse el «éxito» que, sin embargo, lo es menos. Otra lectura técnica de los datos oficiales detecta un parón en el empleo. Los 55.000 parados menos de junio, son muchos menos que la reducción de 70.000 del mismo mes del año pasado y, al inicio de la temporada veraniega, la hostelería ha generado un 10% menos de afiliados a la SS que en junio de 2022. Hay una explicación parcial. Las cifras están sesgadas por la reforma laboral, porque los fijos discontinuos no figuran como parados cuando no trabajan y tampoco se considera que encuentran trabajo cuando regresan a sus puestos. La «vice» Díaz, siempre tensa ante preguntas incómodas, sigue sin publicar las cifras de «fijos discontinuos», con contrato pero sin trabajo. No lo hará antes de las elecciones, claro, y Escrivá tampoco querrá hablar de los datos desestacionalizados de la SS, que indican que se han destruido 20.100 empleos, lo que hace que junio arroje las peores cifras desde 2015. El Gobierno, sin embargo, celebra que el 42% de los contratos firmados en junio son indefinidos, aunque no aclara cuantos son discontinuos. ¡Vamos a contar parados o mentiras, tralará!, algo que tampoco dijo nunca Churchill.
✕
Accede a tu cuenta para comentar