Tendencias
Navidad
Vida Plena
Navidades: gastronomía con conciencia
Llegan las Navidades y nos disponemos a vivir unas jornadas gastronómicas que sirvan de referencia y enriquezcan las celebraciones. En este momento en que la Humanidad se debate en la incertidumbre y persisten las hambrunas no podemos permitirnos desperdiciar los alimentos y eliminar muchos sobrantes. Lo primero es dedicar tiempo a planificar las comidas o las cenas familiares. Pensar y planificar con criterio y conciencia. No comprar demás, sabiendo el número de comensales “a priori” y atribuir las raciones necesarias. El plan de compra tiene que ser sostenible, no comprar “a lo loco”. Alimentarse mejor no tiene por qué ser más caro, siempre que aprovechemos aquellos alimentos de la estación que son los más ajustados en precio.
Aceite de ricino para nutrir la piel y el cabello
Los dos componentes principales del aceite de ricino son los ácidos grasos y la vitamina E, que contribuyen a proteger al organismo de los radicales libres (polución, radicación solar…). Se utiliza desde siglos atrás para nutrir las uñas, evitando que se quiebren o tengan un aspecto enfermizo con las inevitables estrías. Además, el aceite de ricino aporta beneficios al cabello y la piel. Para el cuidado del rostro hay que aplicar tan solo unas gotas y esparcir el líquido con suaves masajes; eso sí espaciando su uso para que no se obstruyan los poros de la piel. Aplicado al cabello purifica y elimina impurezas del cuero cabelludo, mejorando la circulación sanguínea. En aquellas personas que tienen el cabello seco, hay que aplicar un par de gotas sobre la mano y masajear el cuero cabelludo sin ejercer demasiada presión.
Lepidum rompepiedras en el riñón
El lépido es una hierva que se encuentra a orillas de los pequeños arroyos españoles. Se le llama “rompepiedras” porque ayuda a disolver los cálculos renales. También se emplea para prevenir la formación de cálculos, y tiene propiedades diuréticas. Y puesto a destruir, también puede beneficiar la actividad tumoral. Combinada con plantas como el sabal y el pygeum se emplea en el tratamiento de la hipertrofia benigna de próstata. Está acreditada su actividad anticancerígena y tradicionalmente se ha utilizado para eliminar arenilla en los riñones.
✕
Accede a tu cuenta para comentar