Anna y Olivia

Tomás ya avisó hace dos meses que quería irse: “Qué fácil perder el control de tus hijas...”

El padre de las niñas desaparecidas en Tenerife dijo a la madre que quería cambiar de continente y salir de la zona de confort

Buscando explicaciones a por qué el padre de tus hijas se ha llevado a las pequeñas tras asegurarte que “no las vas a volver a ver más”, Beatriz Zimmerman bucea en sus recuerdos de forma recurrente. No están siendo días fáciles para ella, cuando se cumple un mes de la última vez que vio a Olivia y Anna y se encuentra a la espera la llegada de un buque para colaborar en la búsqueda de las menores. Y en esa búsqueda de razones, de recordar cosas que le pudo decir Tomás y que en su momento no supo interpretar, la mujer se ha ido a las conversaciones de WhatsApp que tuvo con él desde que se separaron. En una de ellas, según ha explicado el portavoz de la familia y portavoz de la asociación SOS Desaparecidos, Joaquín Amills, Bea trataba con cariño de que Tomás se repusiera de esa ruptura y le envió un audio de autoayuda de un doctor que a ella le gusta mucho.

Salir de la zona de confort

Él lejos de querer “curarse” de esa ruptura le dijo algo así como: “Una cosa es salir de la zona de confort y otra cambiar de continente”. A Gimeno no le había sentado bien que la madre de sus hijas hubiera rehecho su vida con un empresario belga mucho mayor que ella y se negaba a aceptar que la situación familiar había cambiado: “Qué fácil aceptar que pierdes una familia con la que levas toda una vida, perder el control de tus hijas”.

A pesar de estos mensajes -a disposición de la Guardia Civil que lleva la investigación del caso- y de que ya han pasado cuatro martes sin las pequeñas, Zimmermann sigue optimista, a pesar del sufrimiento acumulado, según explicó ayer en una carta. “Cada día está un poco peor pero estamos un grupo de personas muy pendientes de ella, por momentos se derrumba pero es una persona sin odio y ella se levanta todas las mañanas esperanzada. A veces apaga el móvil y desconecta pero está muy colaboradora con el tema de las redes y la difusión de vídeos”

Con respecto a lo que hizo Tomás, se muestran optimistas. “Sus hijas eran lo más importante para Tomás y él será todo lo que queramos pero nunca maltrató a las niñas”, asegura Amills.

45 millones de difusión

Gracias a SOS Desaparecidos las fotos de los tres desaparecidos y los vídeos que ha proporcionado su madre, las imágenes de las niñas han tenido una difusión de 45 millones y en cajeros de toda Europa unos 140 millones al día. “Según su personalidad y todo lo que hizo, ceder la moto a un amigo, la embarcación a otro, a su novia unos 2.000 euros... creemos que no se ha suicidado ni le ha hecho daño a las pequeñas”.