Las “Cinco Gracias de la izquierda”

Las “Cinco Gracias de la izquierda” se reunieron en Valencia provocando un eco mediático muy por encima, en mi opinión, de las expectativas que les otorga un análisis profundo de su propia realidad. Me he decidido por la versión que ampliaba el número de tres el grupo de las Cárites mitológicas .

Si desmenuzamos la esencia de este quinteto, descubrimos la filfa de sus pretensiones. Por un lado, Yolanda Díaz, que afirma no pertenecer a Izquierda Unida ni a Podemos. Sin embargo, fue Pablo Iglesias quien la catapultó por encima de la compañera sentimental del momento. ¿Cuál es el futuro electoral de esta militante comunista sin el paraguas de Podemos por más pasarelas que recorra?

Algo similar se desvela en el intríngulis de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, entroncada directamente con Podemos al formar coalición en “Barcelona en Comú” por el que se presenta. ¿Qué botín recogerá tras una guerra en su propio grupo?

Las dos presumen de su afrenta a Ione Belarra, Irene Montero y cía de tratarlas como apestadas al no convocarlas al cónclave valenciano, como si las tuvieran acogotadas y dispuestas y a doblar la cerviz sin rechistar.

¿Qué decir de Mónica Oltra? perteneciente a una coalición Compromís, que tan solo ofrece un diputado en las últimas legislaturas, por no hablar de los flancos de su gestión en el Gobierno valenciano y el más grave entredicho por la sentencia judicial que le acusa de mirar hacia otro lado en el asunto de los abusos de su exmarido a una menor. Hasta el Parlamento europeo ha anunciado una investigación al efecto.

Mónica García forma parte del equipo de Íñigo Errejón, que no se ha destacado en su actuación política. Fátima Hamed se suma como estrambote político para formar “Las Chunguitas” (Carlos Herrera dixit), grupo que podría ampliarse a gusto del espectador. Si esta es la gran alternativa de la izquierda, más uno puede dormir tranquilo. Así es la vida.