Crisis

Sánchez pide al PP que resuelva su crisis «cuanto antes»

Asegura que el principal partido de la oposición debe contribuir a la «estabilidad»

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez al encuentro de la primera ministra del Reino de Dinamarca, Mette Frederiksen
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez al encuentro de la primera ministra del Reino de Dinamarca, Mette FrederiksenJUAN CARLOS HIDALGOAgencia EFE

«Pediría que se aclarara cuanto antes», con estas palabras el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se volvió a referir ayer a la crisis orgánica que sufre el Partido Popular desde hace seis días a raíz de la intermediación del hermano de la presidenta de la comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en la adquisición de mascarillas durante los primeros meses de la pandemia. El jefe del Ejecutivo señaló que la «estabilidad» que necesita España también la aporta el principal partido de la oposición, al que además emplazó a aclarar las sospechas de irregularidades en el mencionado contrato. Además, se refirió a la que puede ser una de las consecuencias del estallido de esta crisis: el ascenso de Vox. Sánchez se mostró preocupado y señaló que su auge «no es una buena noticia para ningún demócrata».

Es la segunda vez que Pedro Sánchez se refiere a una de las mayores crisis internas en la historia de los populares. Su primera manifestación se produjo tras la detonación de la tensión interna desde Bruselas donde ya señaló que no interfiere en las cuestiones internas de otras formaciones políticas e insistió, principalmente, en que los populares resuelvan este caso de corrupción. Ayer se pronunció desde La Moncloa tras reunirse con la primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen, y volvió a repetir que él no se va a «inmiscuir» en la situación interna de ningún partido, subrayando que «España necesita estabilidad» y que esta estabilidad «no la aporta solo el Gobierno de España, la aporta también el principal partido de la oposición».

Sánchez hizo especial hincapié en que se investigue si se produjo alguna irregularidad en la Comunidad de Madrid, región a la que se refirió como «bien importante para la arquitectura institucional de nuestro país».

Sobre el posible rédito que puedan sacar los de Abascal tal y como están apuntando los sondeos demoscópicos, Sánchez aseguró que no es una buena noticia ni para el Gobierno ni para el PSOE. En este punto se refirió a las negociaciones para la investidura del popular Alfonso Fernández Mañueco como presidente de Castilla y León con el PSOE y dejó claro que la alternativa a un gobierno de coalición del PP y «la ultraderecha» es «definir un cordón sanitario» a Vox. «Si el PP está dispuesto a comprometerse con ese debate, el principal partido de la oposición (en Castilla y León) está abierto a ofrecer esa alternativa», subrayó el jefe del ejecutivo como alternativa para que el PP pueda gobernar sin tener que contar con el respaldo de Vox. No es la primera vez que Sánchez ofrece sus escaños, eso sí, serían a cambio de que los populares rompan todos sus acuerdos con los de Abascal en las distintas comunidades en la que gobiernan con su apoyo.

El presidente del gobierno rehusó valorar si se entendería mejor con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, en asuntos como la renovación de los órganos constitucionales como el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). «El Gobierno está en trabajar por que la recuperación económica no se frene y en seguir creando empleo para que cuando termine la legislatura, en 2023, hayamos dejado atrás la pandemia y España sea un país mejor», respondió Sánchez, dejando claro que no tiene previsto adelantar las elecciones ante la debilidad por la que atraviesa en estos momentos el principal partido de la oposición.