Alemania descarta su abandono del futuro caza de combate europeo que desarrolla junto a Francia y España

La pasada semana, los cimientos del proyecto para el futuro caza europeo (FCAS) se tambalearon, después de que el prestigioso diario británico The Times publicase el 1 de noviembre, citando además fuentes cercanas al canciller federal de Alemania, Olaf Scholz, que este país estaba contemplando abandonar el mencionado programa Future Combat Air System, que desarrolla junto a Francia y España, para unirse al otro programa paralelo, denominado Tempest, que lidera Reino Unido y en el que participan también Italia y, probablemente, Japón.

Según este medio, la retirada se consideraría debido a una supuesta lentitud del programa franco-español-alemán en comparación con el liderado por los británicos. Además, el Scholz estaría descontento con lo que percibía como un trato preferencial para la industria aeroespacial francesa, tema este que ha venido envenenando el programa desde sus inicios pero que parecía superado después del impulso recibido este año.

Tanto fue así que el propio Ministerio de Defensa alemán, el Bundeswehr, ha tenido que salir al paso de esta afirmación y reafirmar su compromiso con el esfuerzo conjunto con Francia y España. Para ello hizo público un comunicado el 3 de noviembre de 2023 en el que negaba la retirada germana del proyecto: "Alemania sigue unida al proyecto conjunto con Francia y España", dijo un portavoz del Ministerio de Defensa alemán a Breaking Defense. “Los informes de los medios de comunicación sobre la retirada de Alemania son falsos. Actualmente se está construyendo el primer demostrador. Estamos en el camino correcto y continuaremos por ese camino”.

Después de un estancamiento de un año, Dassault y Airbus finalmente llegaron a un acuerdo para la fase 1B del FCAS el 1 de diciembre de 2022. En esta fase los fabricantes desarrollarán un demostrador tecnológico del 'sistema de sistemas' construido alrededor de un avión de combate de sexta generación. conocido como el Caza de Próxima Generación (NGF).

El general Ingo Gerhartz, jefe de la Luftwaffe (la Fuerza Aérea Alemana), reforzó aún más el compromiso de Alemania con el programa FCAS y expresó su deseo de acelerar subprogramas específicos, en particular los componentes no tripulados, conocidos como "transportadores remotos", que ayudarán al NGF en llevando a cabo una variedad de misiones, que incluyen guerra electrónica, reconocimiento, operaciones de señuelo e incluso ataques de saturación. "Podemos sacar a los portaaviones remotos de ese proyecto mucho antes", dijo el general Gerhartz al mencionado medio.

En la actualidad, Airbus Defence and Space recibió el liderazgo del pilar 3 del FCAS, en colaboración con el fabricante europeo de misiles MBDA. Airbus está desarrollando los portadores remotos recuperables (RRC), mientras que los portadores remotos fungibles (ERC) están bajo el liderazgo de MBDA.

Además, el general Gerhartz expresó su deseo de acelerar el desarrollo de un dron de combate que pudiera servir como "compañero leal" del NGF. Para ello, las tres naciones podrían aprovechar varias soluciones tecnológicas desarrolladas por los fabricantes involucrados en el FCAS.

Dassault Aviation también lleva varios años trabajando en un dron de este tipo, con el demostrador de drones de combate furtivos nEUROn . En este programa, en cuyo desarrollo el demostrador realizó su primer vuelo en 2012, participaron seis países europeos, entre ellos Francia y España.

En su próxima ley de programación militar (LPM) para el período 2024-2030, Francia ya notificó "el desarrollo de un dron que acompañará al Rafale, resultado del trabajo del demostrador nEUROn".

Fue el pasado mes de abril cuando se firmó en Madrid el primer contrato (fase 1B y 2) del que será el proyecto aeronáutica más importante de Europa en los próximos años. En dicho acto, que tuvo lugar en el cuartel general del Ejército del Aire, estuvieron presentes los ministros de Defensa de España, Francia y Alemania, Margarita Robles, Sebastien Lecornu y Boris Pistorius, así como representantes de las empresas que lideraran el proyecto por cada país en pie de igualdad, al 33% cada una: la española Indra, la francesa Dassault y Airbus DS, en este caso por parte de Alemania.

En realidad, dicha firma fue protocolaria, puesto que, a nivel industrial, el contrato ya fue sellado en diciembre. Además, Indra, en calidad de co-contratista y líder industrial nacional, firmó en marzo el contrato que supone la puesta en marcha de los trabajos de la Fase 1B que tendrá como objetivo abordar la selección de arquitecturas, desarrollo de conceptos, maduración de tecnologías y validación mediante demostraciones.

El presupuesto inicial es de 3.000 millones de euros, no obstante, los tres países tienen previsto invertir en total 8.000 millones de euros hasta 2029. Todo el proyecto está coordinado por la Dirección General de Armamento (DGA) francesa desde París, donde están las oficinas del programa.

La definición tecnológica del proyecto

La nueva Fase 1B abordará la evolución y maduración de las tecnologías de siguiente generación (propulsión, maniobrabilidad, sensores interconectados y distribuidos, comunicaciones de nueva generación, servicios Cloud, Edge Computing, inteligencia artificial, baja observabilidad, interoperabilidad, etc.), que convertirán al NGWS/FCAS en el sistema de sistemas de combate aéreo más avanzado del mundo, a la vez que facilitarán e impulsarán la digitalización del sector y el nacimiento de nuevas tecnologías duales, con aplicación militar y civil en diferentes sectores.

Se desarrollarán, entre otras, técnicas mejoradas de baja observabilidad en el caza y remote carriers, el motor, las comunicaciones o los sensores de misión. Se impulsarán las tecnologías de sensores multifunción al siguiente nivel en una Suite Multiplataforma de sensores colaborativos en red, tendrá una cabina mejorada con sensorización del piloto y sistemas de visualización e Interfaces Hombre-Máquina completamente disruptivos.

Estas tecnologías se validarán en diferentes demostradores (simulaciones y validaciones de ingeniería demostraciones y validaciones tecnológicas y pruebas de vuelo,) hasta alcanzar el grado de madurez necesario para implantarlas posteriormente en el diseño final. Durante la Fase 1B se establecerán las bases para la Fase 2, de otros tres años de duración, que dará continuidad al programa hasta 2029 y finalizará con un demostrador funcional. Está previsto que las primeras demostraciones en vuelo sean en torno a 2028, con el objetivo final de que el sistema entre en servicio en 2040.

La Fase 1B supondrá, además, una oportunidad para el desarrollo del talento y capacidades tecnológicas propias con la creación de más de 1.000 puestos de trabajo de muy alta cualificación en España, más de 400 de ellos en Indra, a los que se sumarán todos los puestos indirectos generados a través de subcontrataciones, compras y servicios vinculados. España participará en el 33% de los desarrollos tecnológicos de todo el programa, liderando algunas de las actividades clave.

En el pilar de la Nube de Combate, Indra es líder nacional y trabajará con Airbus DS Alemania, como contratista principal, y con Thales como socio para el desarrollo conjunto del elemento habilitador clave del concepto de Sistema de Sistemas que permite capacidades colaborativas sin precedentes entre las plataformas conectadas

Los dos pilares transversales, encargados de la definición y selección de la arquitectura final a nivel Sistema de Sistemas (NGWS), así como todo el proceso de demostración y validación global a nivel NGWS, son coliderados internacionalmente por Indra, Dassault Aviation y Airbus DS Alemania.

Finalmente, Indra lidera internacionalmente junto al resto de co-contratistas del programa la definición y despliegue de un entorno digital seguro para información clasificada de trabajo colaborativo para el programa.