Sánchez, vacaciones

La delgadez de Sánchez y el peso de un verano que ya no controla

Vacaciones silenciosas, aspecto físico mucho más delgado y un Gobierno cercado por la corrupción. Pedro Sánchez mantiene su perfil bajo mientras el relato de resistencia se agrieta ante un curso político que no domina.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, comparece ante los medios de comunicación para hacer balance del curso político, a 28 de julio de 2025, en Madrid (España). Esta fotografía ha sido realizada utilizando la técnica de doble exposición. 28 JULIO 2025 Eduardo Parra / Europa Press 28/07/2025
Pedro Sánchez, en su comparecencia para hacer balance del curso políticoEduardo ParraEuropa Press

Para este verano se espera un perfil bajo del presidente del Gobierno. Su posado con el Rey en Marivent ha vuelto a dar que hablar una vez más por su extrema delgadez. Todo un símbolo, en el análisis político, de que por primera vez en años no controla ni la agenda ni el relato ni el tiempo político. El desgaste de su Gobierno ya no se puede ocultar, y en Moncloa son perfectamente conscientes de ello.

En ambientes políticos, mediáticos y hasta diplomáticos se ha generalizado un comentario; "Está más delgado que nunca". No solo es un apunte estético. En Moncloa preocupa que esa imagen proyecte también debilidad en un momento en el que necesitan más que nunca que el presidente del Gobierno muestre autoridad.

Fuentes del PSOE intentan normalizar la situación, atribuyéndola al ritmo de trabajo y al estrés acumulado de tiempos difíciles. Pero lo cierto es que el aspecto físico del presidente ha generado más comentarios que cualquiera de sus mensajes políticos en este mes de julio.

El silencio y la ausencia del presidente durante este verano hay quien lo interpretará como una táctica de resistencia. Pero cada vez hay más voces que consideran que el silencio del presidente refleja desconcierto porque lo que viene a partir de septiembre no lo marca Moncloa, sino el entorno: el calendario judicial, las investigaciones de la Guardia Civil y el descontento de los socios.

A veces una imagen resume mejor que mil titulares. Y la delgadez del presidente no es, por sí sola, una noticia. Pero sí parece un símbolo de agotamiento, de pérdida de iniciativa. De un presidente que parece que lleva sobre sus hombros el peso de su gobierno y de un partido que cada vez son más lastre.

No es nuevo que los líderes transmitan desgaste por su imagen: se decía que Felipe González envejecía cada vez que perdía un aliado. En el caso del presidente del Gobierno, lo que dicen es que "ya no parece el Sánchez que retó al PSOE en 2016, sino un presidente cada vez más arrastrado por su propio peso político, y cada vez más ligero de apoyos".

Mientras Sánchez desaparece, parece que en el lado contrario, en el PP, sus dirigentes van a estar más presentes que nunca. Con comparecencias continuas y en ese modo electoral de un partido que parece que está ya preparando su Consejo de Ministros.

Sánchez ya enfila su escapada estival a la isla de Lanzarote, una tradición que mantiene desde que asumió la presidencia del Gobierno en 2018. Tal como viene siendo habitual en los últimos veranos, el jefe del Ejecutivo pasará unos días de descanso en la residencia oficial de La Mareta, ubicada en la localidad turística de Costa Teguise, y su llegada está prevista para este fin de semana de agosto. Sin embargo, el presidente también tendrá tiempo para seguir conociendo la isla y disfrutando del mercadillo artesanal de Haría, parada obligatoria del socialista durante cada verano, informa Jorge Siverio.