Feijóo activa la ronda de contactos: llamará en las próximas horas a Pedro Sánchez

En el PP continúan viendo muy difícil la investidura de Alberto Núñez Feijóo, pero lo van a intentar hasta el último momento. Hasta el 26 de septiembre, hay mucho tiempo por delante y más aún en la volátil política española. Los populares se están moviendo para lograr la presidencia del Gobierno, pero también se están moviendo para cambiar el tablero político: por un lado, aspiran a modificar la agenda y los temas que se abordan (dejar de hablar de los intereses de los independentistas para pasar a hablar de las preocupaciones de los ciudadanos) y, por otro lado, pretenden que cale en la opinión pública las diferencias entre el proyecto político de PP y el del PSOE, al que acusan de ceder a todo lo que pide el separatismo para resistir en la Moncloa. "Trabajamos ya en esa investidura en dos planos", ha señalado Borja Sémper, quien ha dicho que trabajan en el "contenido de la propuesta" y en la "apertura de las conversaciones".

El movimiento más inmediato del PP ha sido pedir una reunión con Pedro Sánchez y los socialistas la han aceptado. Feijóo pretende abrir las conversaciones con Sánchez, lo que también se traducirá en el primer encuentro entre ambos en mucho tiempo porque el presidente del Gobierno ha ignorado todas las apelaciones del líder del PP para abordar temas de Estado. El objetivo de Feijóo es testar la "disponibilidad", aunque parece inviable que el encuentro pase de una mera foto porque las diferencias entre ambos son sustanciales. De hecho, en el PP también están por la labor de proyectar esas diferencias, haciendo énfasis en que, por mucho que se abran a hablar con partidos independentistas (salvo Bildu), no van a ceder como Sánchez a todo. “No somos Sánchez y no vamos a vender nuestros principios para llegar a la presidencia del Gobierno a cualquier precio”, ha señalado Sémper, en alusión a la amnistía o al referéndum, líneas rojas para el PP.

Lo cierto es que el PP ha defendido siempre que la posibilidad de que haya conversaciones con Junts es cortesía parlamentaria, pero también pueden permitir a los populares contrastar cómo actúan ellos frente al PSOE: Feijóo no está dispuesto a aceptar la amnistía a cambio de su investidura, mientras Sánchez, sí. Además, también puede contribuir a mostrar más cercanía con una bolsa de electores catalanes próximos a la antigua CiU que todavía desconfía del PP porque temen que acabe arrastrado por las tesis de Vox y devuelva la crispación a la autonomía. En todo caso, está por ver si hay finalmente una reunión con Junts porque los posconvergentes tampoco se han pronunciado. No obstante, Sémper sí ha querido diferenciar a Bildu y Junts o el resto de partidos independentistas: "No hay nadie que, por muy descabelladas que sean sus posiciones políticas, se pueda equiparar a Bildu porque Bildu sigue creyendo que asesinar tuvo alguna justificación".

"¿Es difícil ganar la investidura? Extraordinariamente difícil. ¿Es imposible? No. La investidura que intenta Feijóo no es a cualquier precio, desde luego no es al precio de la desigualdad entre todos los españoles", ha resumido Sémper. "Pensamos que la ley de amnistía no tiene cabida en el ordenamiento constitucional. Políticamente es un despropósito porque no es una medida pensada en el interés general de los españoles sino pensada a dar solo satisfacción y respuesta a los intereses de un solo hombre, Pedro Sánchez", ha afirmado Sémper.

Asimismo, más allá del PSOE y al margen de la ronda de conversaciones que va a iniciar con el resto de grupo parlamentarios, Feijóo va a iniciar una ronda de conversaciones con los presidentes autonómicos para conocer cuál es su "posición, necesidades y requerimientos". Si bien, detrás de esta ronda de conversaciones, los populares también pueden lograr posiciones favorables de algunos presidentes autonómicos de gran importancia, como Emiliano García Page en el PSOE e Íñigo Urkullu en el PNV. Page se ha mostrado muy crítico con Sánchez y tiene una gran autoridad para fijar una posición porque gobierna con mayoría absoluta y, de hecho, ya se ha pronunciado en contra de que el PSOE dependa de Carles Puigdemont. Urkullu está por ver qué posición tiene después de que su partido se haya negado a apoyar a Feijóo por Vox, aunque tiene buena relación personal con Feijóo.

En cuanto a la propuesta de contenido para la investidura, Sémper ha dicho que se va a concretar en tres grandes ámbitos: una batería de medidas económicas, tendentes a conseguir que la economía crezca y cree empleo y a sanear las cuentas públicas reduciendo la carga fiscal; medidas orientadas a la regeneración institucional; y, las reformas "urgentes" que necesita España, relacionadas con la financiación autonómica, la independencia de la justicia, la garantía de las pensiones, el reto demográfico o las necesidades en sanidad.