Sesión de Control
Feijóo dice que en el PSOE corrían "los billetes como en un prostíbulo" y Sánchez replica: "Bulos, mentiras, insidias"
El líder popular reprocha al presidente del Gobierno que "exprime" a los españoles con las cuotas de los autónomos: "En España tiene que merecer la pena trabajar, con usted merece la pena ser un jeta"
Sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados. Alberto Núñez Feijóo preguntó a Pedro Sánchez: "¿Le parece a usted que esto es decente?". Previamente, recordó: "Con usted han prosperado Ábalos [que hoy declara en el Supremo], Santos Cerdán, su familia". Vaticinó que todavía "hay más" y se sirvió de la última subida a los autónomos para atacar por la corrupción: "Mientras en su círculo hacen caja, los españoles hacen cuentas. Las familias que sufren para llenar la cesta a fin de mes ven cómo en el PSOE y en el ministerio de Transportes corren los billetes como en un prostíbulo".
Antes de pasarle la pelota a su rival: "Ha convertido España en un país caro para el trabajador y barato para el sinvergüenza". Oídos sordos. "Este es uno de los Gobiernos más decentes de Europa", respondió Sánchez, que volvió a tirar de cifras macro para concluir: "Lo demás [es decir, la corrupción] son bulos, mentiras, insidias". Y le espetó: "Deje de hablar de la 'caja B', que si existió fue en su partido. Mientras el Gobierno seguirá haciendo de la economía española una economía con triple A".
En el segundo turno, cosa poco habitual en el parlamentarismo español, el líder popular hizo alusión directa a las palabras que acaba de pronunciar su rival, como si realmente aquello fuera un diálogo entre ambos. "Decir que su gobierno es el más decente de Europa es insultar a todos los primeros ministros de Europa". Acto seguido, prosiguió con su crítica: "Usted no dirige un país, lo exprime. Exprime a los que cumplen y protege a los que roban. España está cansada de pagar su corrupción, su malversación, su incompetencia y los privilegios de su gente".
La sensación que tiene la gente, añadió Feijóo, es: Que no trabaja para vivir, sino para mantenerles a ustedes". Sobre la misma idea de corrupción-subidas de impuestos, añadió: "En España tiene que merecer la pena trabajar y con usted merece la pena ser un jeta. Con tantos que le rodean, señoría, trabajar no puede consistir en que el Gobierno te cruja a impuestos. Trabajar tiene que poder servir para tener una vivienda digna y un proyecto vital".
Finalmente: "Trabajar debería de dar esperanza y con usted da rabia. Rabia de ver cómo la decencia no cotiza, de comprobar cómo el mérito no sirve. De ver cómo se castiga al honrado y se premia al indecente. En la España de Pedro Sánchez si trabajas, pagas; si robas, cobras... y si te aplauden, prosperas". En contraposición, prometió una "España en la que merecerá la pena trabajar" y concluyó: "Pondremos fin al saqueo. Deje de hablar de 'triple A', lo que hace es subir a todos los impuestos".
Concluyó el duelo Feijóo-Sánchez tal y como estaba previsto desde el principio. El presidente calló por la corrupción y por las subidas a los autónomos y habló por el aborto, el fallo de los cribados en la Junta de Andalucía y Miguel Ángel Rodríguez. Primer acto del guion: "Este es uno de los gobiernos más decentes de la UE. Lo que no son decentes son sus silencios. Hemos visto a la señora Ayuso decir ante un derecho que se garantiza a las mujeres, que se vayan a abortar fuera de la Comunidad de Madrid. ¿y usted qué ha hecho y qué ha dicho? Nada. Absolutamente Nada".
Segundo acto: "Hemos escuchado al presidente de la Junta decir que los médicos de la Junta no han informado sobre los cribados a las mujeres que tenían esos cribados para no alarmarlas. ¿Y usted qué ha dicho? Nada". Tercer acto: "El jefe de Gabinete de la señora Ayuso reconoce que ha mentido en sede judicial, su partido dice que mentir no es delito, ¿y usted qué dice? Nada".
Y el golpe final. Con ironía. Con chulería. "La pregunta que debemos hacernos es qué aporta usted a la política española... la clave la tenemos en su grupo, que le aplauden para tapar con sus aplausos la nada de sus intervenciones".