Estrategia

Podemos busca impulso con Palestina ante sus dudas de repetir en Moncloa

Belarra y Díaz exigen a Sánchez tener voz en Exteriores en el futuro gobierno de coalición y el PSOE se niega

MADRID, 18/10/2023.- La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, durante su intervención en la reunión de alto nivel sobre la Transición de Sistemas de Cuidados hacia Modelos Centrados en las Personas y en la Comunidad, este miércoles en Madrid. EFE/Chema Moya
MADRID, 18/10/2023.- La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, durante su intervención en la reunión de alto nivel sobre la Transición de Sistemas de Cuidados hacia Modelos Centrados en las Personas y en la Comunidad, este miércoles en Madrid. EFE/Chema MoyaChema MoyaAgencia EFE

La posición de Podemos en el conflicto entre Israel y Palestina ha ido escalando durante toda la semana y ha acabado provocando un choque diplomático que Moncloa trata de minimizar ahora para evitar la imagen que ha restado durante toda la legislatura de un Gobierno dividido sobre todo en política exterior y en los momentos internacionales más convulsos, como con la guerra en Ucrania o la posición de España sobre el Sáhara Occidental. Podemos, mientras, trata de sacar rentabilidad política de su posición propalestina, tradición en la izquierda pero distinta a la adoptada por el PSOE como partido de Gobierno– en medio de la situación de debilidad que mantienen en pleno pulso con Sumar y ante la posibilidad real de perder su representación en el próximo Gobierno de coalición.

La ministra de Derechos Sociales y secretaria general de Podemos ha tratado de liderar la voz alternativa al socio mayoritario en Moncloa y así desdibujar la posición de Sumar, que ahora es el partido hegemónico a la izquierda del PSOE y el socio prioritario de Sánchez para reeditar la coalición de Gobierno. El objetivo es volver a recuperar el espacio de la izquierda que perdió tras las elecciones autonómicas y con su confluencia con Sumar en las elecciones generales. En Podemos se confiesan contentos con esta estrategia y creen que están recuperando voz y apoyo en un momento de máxima tensión con los de Díaz. Venden que "vuelven a ser los únicos" que son capaces de decir lo que "la otra izquierda no se atreve", según deslizan en la formación.

Así, ayer mismo, después de que Moncloa reiterara su petición a los morados abstenerse de opiniones que no atendieran a su «perímetro» –es decir a sus áreas de gestión en Moncloa– la líder de Podemos volvió a agravar el choque diplomático entre España e Israel al retar al PSOE a suspender las relaciones diplomáticas con Israel y un embargo de armas por parte de la Unión Europea para «poner fin a los bombardeos indiscriminados de Israel contra la población civil».

Los morados buscan así centralizar el foco en medio de la crisis en Oriente Próximo y también en medio de la negociación para la investidura, donde Podemos ha pasado en cuatro años de ser los socios prioritarios de Sánchez a dejar de ser imprescindibles. Las cinco demandas de Podemos para apoyar la investidura ni siquiera tienen contestación por parte del PSOE, ni son recogidas en su totalidad por el partido en el que participan, Sumar.

El partido de Ione Belarra aprovecha el momento que vive, todavía en el Gobierno en funciones, para copar la agenda internacional y a la vez rearmarse en un momento de debilidad dentro de Moncloa, donde fuentes del partido reconocen que no tienen «ninguna garantía» de contar con un ministerio en el futuro gobierno de coalición. Los morados han pedido a Pedro Sánchez y a Yolanda Díaz retener el departamento de Igualdad y que sea en manos de Irene Montero. Una exigencia que no ha sido contestada por PSOE ni por Sumar.

A la vez, el conflicto en Oriente Medio cuenta con otra réplica en medio de la negociación de Gobierno. A la discordancia de voces ante el conflicto entre Israel y Palestina, se suma la ofensiva en la que sí van de la mano Podemos y Sumar, que busca que el PSOE coordine de manera conjunta la política exterior de España. El ministerio de Exteriores está en manos del PSOE y no se prevé que en el futuro recaiga en Sumar. Es por eso que los socios minoritarios han alzado sus voces con más ahínco en los últimos días para pelear la coordinación de la cartera. La ministra Ione Belarra pidió ayer que en la negociación entre PSOE y Sumar, las «cuestiones tan importantes como la política exterior se pacten también con el otro socio de Gobierno». A la vez, Yolanda Díaz trabaja en la misma dirección. Esta misma semana exigió al PSOE que en el acuerdo de coalición figure el reconocimiento de Palestina como Estado, algo que el partido de Sánchez se ha negado a firmar. Además, la líder de Sumar se interesó por el choque tras el comunicado de Israel y pidió a Albares una respuesta conjunta como Gobierno.