Los territorios de Podemos se sublevan y le exigen pactar con Sumar: "Sería una irresponsabilidad"

El pacto que no llega entre Podemos y Sumar desespera ya a buena parte de los territorios morados y ha hecho explotar la conexión de la organización estatal con sus extensiones territoriales. La posibilidad de que no se cierre un acuerdo entre los de Ione Belarra y los de Yolanda Díaz está en el aire y cada vez coge más impulso. Hasta este momento, ni dirigentes de una ni de la otra parte se atreven a mandar un mensaje de optimismo sobre la unidad Podemos-Sumar.

La ruptura es más que una posibilidad una vez que hasta cuatro territorios morados exigieran a la dirección estatal del partido que aceptara un acuerdo global con la vicepresidenta. Se mandaron mensajes alarmantes desde Extremadura Navarra, Canarias, Galicia y Madrid y se avisó de que si no había un acuerdo, la cúpula de Podemos debía dar «pasos al lado». Hasta militantes de Podemos en Valencia lanzaron un manifiesto reclamando integrarse en una «confluencia amplia». La importancia de los partidos se mide por sus estructuras territoriales y en estos momentos la dirección de Podemos solo cuenta con el apoyo fiel de Castilla-La Mancha, Castilla y León, Andalucía, Murcia, Baleares y Valencia. En Asturias, la diputada crítica que consiguió escaño ya pidió acuerdo con Sumar y La Rioja y País Vasco son afines a Yolanda Díaz.

El batacazo en las urnas del 28-M fue un punto de inflexión y desde varios territorios se pedía responsabilidades a una dirección que ha pasado de puntillas por la asunción de responsabilidades. Ahora, cuando quedan solo dos días para que venza el plazo para llegar a un acuerdo con Sumar, cinco territorios importantes marcan el camino a los de Ione Belarra.

La más contundente fue la líder de Podemos en Extremadura, Irene de Miguel, que pidió «dar un paso al lado» a quienes no quieran participar dentro de Sumar. «Aquellos que no quieran unidad tienen que dar un paso a un lado y dejar a los que creemos que la unidad sí es el camino». La líder de Extremadura es una de las dirigentes territoriales con más autoridad dentro del partido en estos momentos. Es la única candidata que ha logrado mantener sus resultados autonómicos en contraste con la deriva general del partido en el resto de comunidades. Con sus cuatro escaños, los mismos que en 2019, reclama un acuerdo de la dirección de su partido con Sumar. «Hay que hacerlo con el motivo de ilusionar a la gente e intentar revalidar un gobierno de coalición que transforme las políticas», sentenció. «No hay otro camino».

Navarra también apuntó directamente a la secretaria general de Podemos. Su líder Begoña Alfaro está totalmente alineada con Sumar y su confluencia «Navarra Contigo» ha marcado los pasos al partido al conseguir una candidatura de unidad en la comunidad. Alfaro advirtió que sería una «irresponsabilidad» que no hubiera acuerdo para concurrir a las elecciones generales. «Tenía que haber llegado hace meses», criticó. «Sería una irresponsabilidad impresionante que no se produjese», advirtió. El coordinador autonómico en Galicia, Borja San Ramón, apostó por la unidad y avisó de que «acordar no es resignarse». Llamó a su partido a hacer «posible lo necesario» para pactar con Sumar.

Misma línea la seguida por la candidata de Podemos en la Comunidad de Madrid, Alejandra Jacinto. En una carta dirigida a la militancia, que se lee en clave nacional, aboga por la confluencia a la izquierda del PSOE. «Creo que hubiéramos conseguido frenar a la derecha si hubiéramos conseguido la unidad de las fuerzas progresistas a la izquierda del PSOE. Unidad, no como fetiche, unidad no sólo como resultado, unidad como forma de hacer política en común tanto dentro como fuera de las instituciones», pidió. Desde Canarias, el partido expresó su compromiso «inequívoco» con Sumar.

Mientras, desde la cúpula de Podemos se imponía la prudencia ayer, ante la rebelión y trasladaron toda la presión a Díaz. «Vamos tarde», zanjaban