Casa Real

El resurgir de Jaime de Marichalar

Tras su separación de la infanta Elena, los conocidos dejaron de llamar y no hubo gestos de protección por parte de Casa Real

Victoria Federica y su padre, Jaime de Marichalar, en el desfile de Dior en París, el año pasado.
Victoria Federica y su padre, Jaime de Marichalar, en el desfile de Dior en París, el año pasado.Zabulon Laurent/ABACAGTRES

Jaime Marichalardecidió hace tiempo dejar de ser personaje. Lo fue en su calidad de marido de la Infanta Elena y durante ese tiempo le hicieron la ola los pelotas oficiales. Perteneció a consejos de administración por ser yerno real y formó parte de la llamada élite social. Disfrutó de invitaciones al más alto nivel y almuerzos en los comedores privados de las empresas del IBEX. Tuvo a su disposición vuelos gratis en Iberia siempre en clase VIP. Esta regalía fue la única que siguió manteniendo ya como duque sin título y divorciado. Todo cambió con la separación. Los conocidos dejaron de llamar y de invitar a sus aviones privados. Tampoco hubo gestos de protección por parte de la Casa Real. La Reina Sofía y la Princesa Letizia sí respetaron al que había sido el marido de la primogénita Borbón Grecia y padre de los nietos reales.

Cuando viajaba a París, durante los desfiles de Alta Costura, se escondía si había prensa española. O si le pillaban pedía que no se publicara su imagen. «Vengo a trabajar», decía. Y esa era la razón de sus estancias en la capital de Francia, como él mismo confirmaba a quien esto firma: «Viajo mucho porque forma parte de mis responsabilidades». Marichalar desde hace años forma parte del círculo de confianza del magnate Bernard Arnault, el propietario de las marcas más importantes de lujo que engloban LVMH. Quienes conocen su trabajo confirman a LA RAZÓN que «si no fuera competente, no formaría parte del organigrama de la primera fortuna de Francia», zanjan de manera contundente.

Victoria Federica y su padre, Jaime de Marichalar, en el desfile de Dior en París.
Victoria Federica y su padre, Jaime de Marichalar, en el desfile de Dior en París.Zabulon Laurent/ABACAGTRES

Ha sido Victoria Federica la que ha conseguido que su padre no se esconda en un verdadero acto de amor entre padre e hija. Le hemos visto en uno de los desfiles más carismáticos de Alta Costura de París como fue el de Dior. Siempre ha tenido una buena relación con sus hijos que han vivido con la Infanta aunque en muchas ocasiones nuestro protagonista no estaba ni está de acuerdo con la permisividad de la madre.

Marichalar fue nombrado hace dos años consejero de Fendi Retail Spain, con sede en Barcelona. Es asesor de su gran amigo el joyero Esteban Rabat en temas de lujo y estrategia. Consejero de Loewe y socio de la empresa de trajes a medida BCorner. Tuvo relación profesional con Robert Balkany, que estuvo casado con María Gabriela de Saboya, hija de los reyes de Italia. También Balkany, dueño de la Sociedad General Inmobiliaria especializadas en la gestión de centros comerciales, le nombró consejero. Marichalar es además propietario de un triplex en el barrio de Salamanca. «Es una de las personas que mejor recibe», confirman sus amigas de la alta sociedad francesa.