Alexia de los Países Bajos: "A veces llamo a mis padres dos veces al día"

La princesa Alexia, hija de la reina Máxima y el rey Guillermo Alejandro de los Países Bajos, estrenó década el jueves 26 de junio. Con 20 años recién cumplidos, dice adiós a la adolescencia y entra en una nueva etapa centrada en sus estudios y en sus deberes como princesa, segunda en la sucesión al trono neerlandés.

Tras obtener su diploma de Bachillerato Internacional en UWC Atlantic en Gales, donde se graduó junto a la Princesa Leonor en 2023, la segunda hija del rey Guillermo Alejandro y la reina Máxima se tomó un año sabático. En septiembre de 2024 inició sus estudios en el University College de Londres, donde ha escogido la carrera de Ciencias e Ingeniería para el Cambio Social en la University College London, centrada en formar líderes capaces de transformar la sociedad desde una perspectiva técnica, política y ética.

Su nueva vida en Londres, en el barrio Bloomsbury, no está exenta de dificultad y recientemente ha hablado de ello en una entrevista en la que deja claro que sufre la distancia familiar del mismo modo que el resto de los jóvenes que deciden estudiar lejos de su país natal.

Preocupada por la sostenibilidad y el ciberacoso, en la conversación aborda temas que atañen a su generación. "Soy muy consciente del daño que pueden hacer las comparaciones constantes en línea, sobre todo entre los jóvenes… Me alegra mucho que los problemas de salud mental ya no se subestimen como si fueran simplemente una etapa adolescente. Ahora, al menos, se toman en serio", afirma.

Normalizar la terapia

La Familia Real holandesa ha normalizado hablar de salud mental. Tanto la reina Máxima como la princesa Amalia han reconocido en diferentes ocasiones que reciben habitualmente apoyo psicológico, especialmente en los momentos en los que se ven sobrepasadas. Para Alexia, una de sus mejores terapias son las conversaciones telefónicas con su familia. "A veces llamo a mis padres dos veces al día. Como la mayoría de las personas que se han mudado, creo que llamo más a mi madre que a mi padre", reconoce.

Habla con admiración de cada uno de ellos, especialmente de su hermana menor. "Ariadne es una de las chicas más dulces que conozco. Y tan dulce e inteligente... Estoy muy orgullosa de la personalidad que ha adquirido".

Pasión por la moda

Sobre su vida cotidiana, la princesa trata de llevar una vida lo más normal posible, como refleja en los contenidos que comparte en su cuenta de Instagram. Disfruta del hockey, la equitación y el esquí, aunque esta última práctica le ha costado más de una lesión. Además, canta y toca el piano. Sobre todo, le encanta la moda. Ahí es digna heredera de su madre, una de las royals más estilosas de Europa.