La hija de la reina Camilla Parker, en serios apuros: su negocio echa el cierre

En la familia real británica, o más bien en sus allegados, las cuentas no terminan de cuadrar y los números rojos copan titulares por doquier. Mucho se ha hablado de los problemas en los negocios del hermano de Kate Middleton, así como aquellos que atraviesan sus padres, que han tenido que echar el cierre a su empresa Party Pieces con una deuda que asciende a los tres millones de libras. Pero la crisis económica no solo ha afectado a los seres queridos de la princesa de Gales, sino también a los de la propia reina Camilla Parker Bowles. En su caso, es su hija, Laura Lopes, la que pasa apuros en su negocio como consecuencia de la fuerte inflación que asola con especial gravedad en Reino Unido, agravado por las consecuencias del coronavirus, el Brexit y el revés que ha supuesto las guerras en el mundo. Y es que la joven también ha tenido que echar el cierre a su negocio, acosada por la falta de ingresos.

La hija de la esposa del rey Carlos III de Inglaterra no atraviesa tampoco buenos momentos económicos y de poco o nada le sirve ser un satélite de la familia real británica. Es por eso que su boutique en Londres, Mojo & Mccoy ha colgado el cartel de ‘cerrado’ tras ocho años de actividad, tal y como han confirmado desde el diario ‘Daily Express’. Un sueño truncado tanto para Laura como para su marido, con el que inició esta aventura empresarial en la que habían depositado todas sus esperanzas. Un proyecto que nació con ayuda de sus mejores amigas y que trataba de acercar la moda a las mujeres con diseños atemporales con originales piezas donde el tejido denim era la estrella, como así destacaban en su propia página web oficial.

“Mojo & Mccoy nació de un grupo de mujeres de negocios de Wiltshire, apasionadas por el denim, las marcas únicas, el servicio al cliente y las tendencias atemporales en materia de diseño”, acercaban su ideal a un público que, sin embargo, parece no haber respaldado su iniciativa. Así, ocho años más tarde, la boutique de la hija de la reina Camilla Parker ha tenido que cerrar para evitar un mal mayor a la economía familiar, a pesar de tener a la consorte real como una de sus clientas y embajadoras más populares. A la madre le encantaba vestir de la marca Cefinn, mientas que a Kate Middleton, también clienta suya, se dejaba ver con joyas de Catherine Zoraida. Pese a este exclusivo escaparate que supone tener a las mujeres de La Firma, lo cierto es que no ha servido para salvarla del cierre de su negocio.