En Renania del Norte Westfalia está uno de los más bellos castillos del país y, quizás, de Europa: el castillo de Anholt, sede de la familia principesca de Salm Salm, soberanos hasta 1813, a la que el emperador encomendó mantener el orden en el Rin a principios del siglo XVII, velando por el cobro de los aranceles aduaneros y por la continuidad del tráfico marítimo a través de ese río. Es un símbolo del oeste de Münsterland y pertenece a la familia desde hace más de 350 años. Allí vivía hasta su muerte, en un apartamento que llaman el «belle étage», el jefe de esta importante familia, el príncipe Carl Philipp, con su esposa la princesa Elisabeth. El 6 de agosto de 2024 falleció a los 91 años de edad.

El escudo de los Salm Salm, en el que aparecen dos salmones, es lo que en heráldica llamamos «escudos parlantes» porque «hablan» del apellido del linaje. Rodeado de 150 hectáreas de bosques y jardines barrocos se yergue el castillo de Anholt, circundado de agua, con un campo de golf y un parque, el «Anholter Schweiz», con linces, gatos monteses, renos, osos, burros o pavos reales.

Un hotel, con restaurante y vistas, permite a los visitantes disfrutar de la visión del castillo. Éste fue destruido en un 70% por bombas británicas durante la Segunda Guerra Mundial debido a que desde su parque se lanzaban V2 sobre Londres. El edificio principal quedó sin tejados, así que la familia se trasladó a vivir al sótano. Se tardaron 50 años en reconstruirlo. Carl Philipp y su padre el príncipe Nikolaus Leopold fueron los artífices de tamaña empresa. Éste era hijo del principe heredero Emanuel de Salm Salm y de la archiduquesa María Cristina de Austria, hermana de María Ana, mujer ésta de Elías de Borbón Parma, duque de Parma, bisabuelos de Don Pedro de Borbón-Dos Sicilias, duque de Calabria, gran maestre de la Sacra y Militar Orden Constantiniana de San Jorge, de la que el príncipe Emanuel fue nombrado Delegado para Alemania, además de haber sido elegido gran maestre de la Asociación de Hermandades Históricas de Fusileros Alemanes. María Cristina era hija del archiduque Federico de Austria, hermano de la reina María Cristina, esposa de Alfonso XII. Por tanto, Don Felipe VI y el Duque de Calabria son parientes cercanos de los Salm Salm.

Las obras de arte fueron salvadas al trasladase en 90 camiones a un túnel en Sauerland en 1943. Hoy, 35.000 visitantes al año recorren las salas del castillo y admiran la magnífica colección de arte en la que destaca «Diana y Acteón» de Rembrandt, de 1635, comprado al pintor por la familia. La sala de los caballeros con su galería de antepasados es imponente, así como la sala de desfiles desde cuya cama los príncipes soberanos daban órdenes, durante la «lever du Prince». Llama la atención una mesa para jugar al tricktrack –backgammon–, al molino y a las damas. Es un mueble hecho en Viena al modo de Boule y regalado por el emperador José I al príncipe Karl Theodor Otto de Salm Salm, consejero privado y tutor de ese monarca y director de obra del palacio de Schönbrunn. Los emperadores debían aprender un oficio. José I aprendió carpintería y realizó un mueble azul y oro, con acuarelas incrustadas, que regaló a su tutor y que se conserva en Anholt. El archivo familiar es excepcional y es dirigido, como el museo, por Duco van Krugten, único archivero a tiempo completo de un archivo aristocrático en Alemania. Entre sus fondos hay documentos del príncipe Félix de Salm Salm, casado con una sobrina de Abraham Lincoln. Agnes, que así se llamaba, intervino para salvarle la vida, aunque fallecería en la guerra franco-prusiana de 1870. Fue edecán del emperador Maximiliano de México, conservándose en el archivo la bala que mató a este soberano.

Emanuel de Salm Salm, ya jefe de familia, se encargaba en vida de su padre de la gestión del principado, desde su castillo de Rhede. Muy consciente de su responsabilidad y amante de las tradiciones, es doctor en Derecho especialista en Derecho Sucesorio, habiendo hecho su tesis sobre los derechos o prerrogativas de la primogenitura, investigando en el archivo familiar. Conservar y mantener intacto un patrimonio así requiere enfocar el trabajo a modo empresarial. Lo hacía el príncipe Carl Philipp con ayuda de su primogénito.

El mantenimiento de Anholt cuesta entre 250.000 y 350.000 euros anuales. Los ingresos dependen de la agricultura y la silvicultura. Desde los años 70 el castillo se alquila para filmar películas y contribuir así al mantenimiento. La primera fue «Rivales del Hipódromo», con actores como Margot Hölscher, o Thomas Fritzsch. Tambien se filmó «Cenicienta».

La madre de Carl Philipp era bávara, pero de lo que no hay duda es de que él y su hijo Emanuel han sabido hacer honor a sus raíces westfalianas.

El futuro de la Casa Salm Salm

El príncipe Emanuel, nuevo jefe de la dinastía, contrajo matrimonio en 1992 con Zita von Klot-Heydenfeldt. La unión fue anulada. En 2010 se casó con Anne Seyfang. Ante la ausencia de descendencia de ambos enlaces, el futuro de la Casa de Salm Salm estará presumiblemente en el príncipe Wilhelm Florentin Maria, de 19 años, hijo del príncipe Philipp, hermano del príncipe Emanuel. Wilhelm Florentin es un nombre tradicional en la familia. Así se llamó, entre otros miembros del linaje, el sexto abuelo del joven.