
Filtraciones
Marius Borg, en apuros: dos grabaciones de la pelea complican su defensa
Agredió física y verbalmente a su novia, pero también la amenazó con gravedad. Está grabado. Ahora se ha filtrado. Lo tiene muy difícil

Aunque la Casa Real noruega haya tratado de extender sus brazos para proteger a Marius Borg, lo cierto es que cada vez se enfrenta a un horizonte judicial más delicado. Lo que su abogado consideró como un delito poco grave, ha mutado a una detención por agresión física y verbal contra una joven de 20 años que ya ha roto su silencio y sigue en shock. Su madre, la princesa Mette-Marit incluso ha hablado con ella para minimizar las consecuencias de sus actos, que podrían valerle un año de prisión. También su padrastro, el príncipe Haakon, está siguiendo de cerca su caso, pero parece que no le quedará más remedio que responder ante sus acciones ante un juez, después de que las últimas revelaciones le dejen de nuevo en un atolladero sin salida.

Incluso han salido testimonios de otras exparejas del primogénito de la princesa noruega, señalando su supuesta conducta agresiva y se presentan como víctimas de malos tratos físicos y psicológicos. Algo que podría haberse repetido la noche en la que su discusión con su exnovia Rebecca Helberg Arntsen se les fue de las manos, llegando a aparecer incluso cuchillos clavados en la pared. Poca broma. Pero ahora se le complica aún más la posible defensa, pues se han filtrado unas grabaciones que probarían la versión mantenida por la joven en comisaria. Unos audios en los que se escuchan amenazas muy graves, como quemarle la ropa o pegarla si no cumple sus exigencias.
Estos audios son, en realidad, conversaciones telefónicas entre Marius y su exnovia. Ya están en manos de las autoridades y formarán parte de la colección de pruebas que ayuden a la víctima a sustentar su testimonio ante el juez. Antes los ha publicado el medio ‘VG’. Son dos. Se grabaron antes de su detención por llevar a cabo las amenazas que promete. En el primero se puede escuchar cómo el hijo de Matte Marit de Noruega le exige a su ex que acuda a su domicilio a recoger sus pertenencias a una hora concreta elegida por él. Si ella no cumple, su ropa y demás pertenencias acabarán quemadas y en un contenedor de basura. En la segunda conversación grabada y filtrada se puede oír a Marius decir que le iba a “golpearla con la mano abierta”, mientras ella dice haber sido víctima de intentos de estrangulamientos, entre golpes como la contusión en la cabeza por la que tuvo que ser atendida en el hospital.

Pero Marius Borg lo tiene aún más complicado aún. No solo tiene en su contra el testimonio de su ex acusándole, las pruebas recabadas en el domicilio donde sucedió la agresión, con cuchillos en la pared y todo destrozado. También están estos audios que confirman lo denunciado y también testigos presenciales de la monumental pelea. Son los vecinos de abajo, que escucharon todo y han roto su silencio: “Se oyeron gritos y un alarido. Oímos dos golpes fuertes encima de nosotros. Fue horrible y no es algo que uno esperaría oír por aquí. Este es un barrio muy tranquilo”, señalaba a la prensa noruega, conmocionada con este episodio que copa cientos de titulares a diario. “No conocemos realmente a la chica que vive arriba, pero cuando leímos que un miembro de la familia real estaba involucrado nos sorprendimos. Solo ahora que hemos visto todos los medios de comunicación que hay por aquí hemos atado cabos y nos hemos dado cuenta de lo que ocurrió. Espero que esté bien, porque pareció un incidente terrible, incluso teniendo en cuenta la amortiguación del sonido a través de las paredes y el suelo”, añade.
Viendo la que se le está viniendo encima y quizá asesorado por su abogado y su madre, Marius Borg ha roto su silencio. Lo hace concediendo una entrevista a ‘NRK’ para reconocer sus errores y para poner el foco en sus adicciones: “El fin de semana pasado sucedió algo que nunca debería haber sucedido. Cometí lesiones corporales y destruí objetos en un apartamento en estado de ebriedad tras haber consumido alcohol y cocaína después de una discusión. Tengo varios trastornos mentales, lo que significa que a lo largo de mi infancia y de mi vida adulta he tenido y sigo teniendo varios desafíos. He luchado contra el abuso de sustancias durante mucho tiempo, algo por lo que he estado en tratamiento en el pasado. Ahora retomé este tratamiento y lo tomaré en serio. El consumo de drogas y mis diagnósticos no excusan lo que pasó en el apartamento de Frogner la noche del domingo del fin de semana pasado. Quiero ser responsable de lo que he hecho y daré las explicaciones sinceras a la policía. Para mí, lo más importante es pedirle perdón a mi novia. No merecía lo que pasó esa noche, ni la presión extrema de la prensa noruega y extranjera después. Ser perseguida por fotógrafos y periodistas en un momento como este, sé que ha sido difícil de soportar. También quiero pedir disculpas a mi familia. Sé que mis acciones os han afectado en gran medida”, pedía perdón públicamente, tratando de hacerse entender tras la polémica detención.
✕
Accede a tu cuenta para comentar