En peligro los Juegos Invictus del príncipe Harry: despidos y falta de presupuesto

Desde su creación en 2014, los Juegos Invictus se han convertido en uno de los buques insignia de la importante labor social que el príncipe Harry desarrolla a través de diferentes fundaciones. El objetivo de esta especie de olimpiadas es reconocer a los veteranos de guerra que sufren algún tipo de lesión, ya sea física o mental, a consecuencia de prestar servicio. Están inspirados en los Warrior Games, un evento deportivo similar organizado por el Departamento de Defensa de los Estados Unidos y que tiene lugar cada año desde 2010.

Los Juegos Invictus fueron ganando prestigio y notoriedad a partir de su creación y, salvo en el año 2020 por culpa de la pandemia de coronavirus, han transcurrido con normalidad en todas sus ediciones.

Ahora se han visto salpicados por una polémica después de que el director ejecutivo Peter Lawless, abogado olímpico y paralímpico de Canadá, "haya sido despedido sin razón aparente", según informa el tabloide inglés "Mail Online".

No ha sido esta la única baja del equipo. El pasado mes de octubre también se prescindió de los servicios Bill Cooper, quien fuera director comercial de la organización. Se trata de unas destituciones que han minado la moral del resto de trabajadores, que han mostrado su apoyo a sus excompañeros y han expresado que sus ceses son "un error".

Este clima de "confusión" entre los empleados ha destapado también otros problemas que deben afrontar los Juegos Invictus, como la falta de financiación. El medio citado anteriormente asegura que algunos organizadores están "preocupados" por el agujero que pueden hacer en el presupuesto los elevados costes que conlleva el equipo de seguridad privada del príncipe Harry y Meghan Markle.

"(Los despidos) Son un revés significativo cuando falta poco más de un año para celebrar los Juegos, que, según me han dicho, superan con creces el presupuesto y no hay ningún plan para cerrar la brecha, incluso después de obtener 30 millones de dólares de apoyo gubernamental de la Provincia de Columbia Británica y el Gobierno Federal de Canadá", desliza la fuente consultada.

A no ser que la situación vaya a peor y provoque males mayores, está previsto que la nueva edición de los Juegos Invictus se celebren en febrero de 2025 en Vancouver y Whistler. Será la primera que también albergue juegos de invierno.