Crónica

Mariñas no se calla ni en el hospital : “Las nuevas cejas de Ortega Cano causan cachondeo”

Ortega Cano
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Impacta conocer el fichaje del torero que acaba de hacer Isabel Díaz Ayuso. La tan entendida y aficionada presidenta de Madrid. Sin duda, la utilizará de asesora, consejera y apoyo. Él aportó su carrera y nombre al Centro de Asuntos taurinos madrileño. Colaborará con Miguel Abellán, que es su íntimo. Lo relacionaron con Gloria Camila. Es una buena noticia en vísperas de los isidros. Los toros vuelven a Madrid después de dos años de pandemia, Dios sea loado, como puede verse y aplaudirse no todo estaba perdido. Siempre hay que confiar y más tratándose de cuernos.

El maestro José Ortega Cano, con 78 años, se somete a un retoque de cejas para mejorarse. El torero, tras salir de la intervención, asombró a todos con el estirón que se ha pegado. A su edad, anda que ya hay que tener ganas para ponerse más cejas, lo superó hace años. Causa regocijo, asombro y también cachondeo. Se ha hecho un micro injerto de cejas que duró 5 horas, dentro de dos semanas podrá hacer vida normal. No es nada guapo. Y con esta operación perderá personalidad. Lo recuerdo cuando se caso con Rocío Jurado. Tan torero, mejor persona. Fue una boda multitudinaria de aquellas de las de antes que suponían todo un espectáculo. Cosa que no se ha repetido con la actual mujer, Ana María Aldón. Ya hecha y rehecha una estrella televisiva y de los photocalls previo pago. Durará mucho, conocen las claves, saben cómo usarlas y qué cosas evitar. Y bien lo demuestra en sus repetidas operaciones estéticas. Es una mujer más interesante que guapa, sin duda, de mucha personalidad, pero nunca la llamaría una belleza dados sus retoques estéticos. Ella y la Jurado resultan incomparables. Lo que Rocío tenía de auténtica y natural, esta lo tiene de artificial.

Es una historia que nos dará todo el juego que queramos, muy propensa al folletín facilón. Ella y el matador tuvieron todo tipo de problemas familiares, pero lograron disimularlo. Gracias a todo eso, el pueblo está realizado, contento y feliz.

Del mal, el menos, como puede verse y solo cabe pedir que este buen estado, aparentemente se mantenga. Con el nuevo trabajo el torero renace. Y quizás confíe en recuperar la fama tuvo. No le será fácil, pero al menos puede intentarlo. Ojalá lo consiga. Solo cabe pedir y desear que el tema no se agote enseguida. Sería la forma de lograr que nos diera risas, distracción y ánimo. Tenemos asunto para largo, divertido y animado, si todo resulta como pensamos.