Luis Enrique y la afición del PSG dedican la victoria a su hija fallecida, Xana

El PSG, campeón de la Champions tras vencer al Inter de Milán en la final con un contundente 5-0, regaló ayer sábado el momento esperado por su entrenador, Luis Enrique: la ocasión de ganar una Champions y poder dedicársela a su hija Xana, fallecida en 2019.

El entrenador asturiano lleva siempre a Xana en su corazón y en días tan significativos como el que vivió en la tarde del sábado frente al Inter de Milán la siente como un propulsor de energía. Inmediatamente después de finalizar el partido cambió su camiseta por otra de la Fundación Xana con el dibujo de un momento que vivió en 2015, cuando ganó su primera Champions como entrenador (del Barça, en ese momento). Aquel día su hija Xana plantó una bandera en el centro del campo.

El cariño desde la grada

El gesto emotivo de Luis Enrique fue correspondido por los aficionados del PSG, que, desde la grada, desplegaron una pancarta simbolizando ese mismo momento. "Xana está conmigo en la victoria, pero en la derrota mucho más. No es un día para estar triste", expresó emocionado.

"Recuerdo una foto increíble que tengo con ella en la Final de la Champions, clavando una bandera del Barcelona en Berlín después de ganarla. Tengo el deseo de hacerlo con una bandera del PSG. No estará mi hija físicamente, pero estará espiritualmente y eso para mí es muy importante”, declaró en conferencia de prensa el 5 de julio de 2023, en su presentación como estratega del París Saint-Germain de la Ligue 1 de Francia.

El 29 de agosto de 2019, el asturiano comunicó el fallecimiento de su hija, de nueve años, a causa de un osteosarcoma, diagnosticado cinco meses atrás. Se trata de un cáncer que afecta los huesos, más común en niños y adolescentes. Meses antes, había dimitido de su cargo como entrenador de la Selección española para priorizar el cuidado de la pequeña y arropar a su familia en el momento más complicado. En un comunicado en X, expresó su tristeza y agradecimiento por el apoyo recibido durante los cinco meses de lucha de su hija contra la enfermedad.

Regresó al banquillo de La Roja en noviembre de 2019, con la que estuvo hasta la eliminación en los Octavos de Final de Qatar 2022. "El futbol es importante, pero la vida lo es aún más. Cuando has visto lo peor, ya no temes lo que pueda pasar en el césped", confesó.

Desde entonces, Luis Enrique se aferra a esa dimensión humana espiritual para levantarse a sí mismo. Pese a la tragedia, se considera "muy afortunado" porque la pequeña "vino a vivir con nosotros nueve años maravillosos y tenemos mil recuerdos de ella, vídeos, cosas increíbles..."

Xana era la tercera hija del asturiano y su esposa Elena Cullell, padres de otros dos hijos, Pacho y Sira, que también compartió la imagen de un aficionado luciendo la camiseta personalizada con el nombre de su hermana y el número 9.