El verano no solo ha traído calor, también nuevas pasiones. Óscar Casas y Ana Mena han dejado de lado la discreción y se han rendido, por fin, al amor a plena luz del sol. Marbella, tierra natal de la cantante, ha sido el escenario elegido para su primer verano juntos, y el romance no podría ser más cinematográfico: playa, lujo, sonrisas y un sinfín de caricias que hablan más que cualquier comunicado.

Las imágenes, captadas en exclusiva por "Diez Minutos", no dejan lugar a dudas: están enamoradísimos. Y aunque los rumores llevaban meses persiguiéndolos desde que se conocieron en el rodaje de Ídolos el verano pasado, fue solo hace unos días cuando oficializaron su relación compartiendo su primera imagen juntos en redes. La chispa saltó entre cámaras en agosto de 2024, y desde entonces, la historia se ha ido cocinando entre conciertos, rodajes y escapadas.

Declaración silenciosa

Ahora, la pareja se deja ver relajada en las playas de Marbella, alojada en un resort de cinco estrellas donde han disfrutado del sol andaluz y de su compañía mutua. Ana, radiante, ha llevado a Óscar a su tierra como declaración silenciosa de que este romance es mucho más que una aventura estival. Él, por su parte, se muestra más feliz que nunca. Portada reciente de Men’s Health, ha confesado que el verano es su estación favorita y, a juzgar por estas vacaciones, no es difícil entender por qué.

Mientras Ana celebra el éxito rotundo de su gira Bellodrama y espera el estreno de Ídolos -donde, irónicamente, se enamora de Óscar en pantalla-, él también saborea el buen momento de su carrera con el estreno de El gran salto en Atresplayer. La pareja parece haber encontrado el equilibrio perfecto entre amor y trabajo, compartiendo no solo escenas, sino proyectos y afectos.

Del plató a las playas, su historia es digna de una comedia romántica moderna. Y si algo queda claro tras ver sus fotos veraniegas es que Óscar y Ana no están actuando. El amor es real, el escenario es de postal y los protagonistas ya no se esconden.