Familia Real británica

Ni rastro de la presunta infidelidad del príncipe William

La red borra cualquier rastro de la supuesta infidelidad del príncipe de Gales con Rose Hanbury. ¿Tenía razón el príncipe Harry cuando hablaba del "trato" de la familia real con los medios?

El príncipe William y Kate Middleton atendiendo a Rose Hanbury en una gala benéfica
El príncipe William y Kate Middleton atendiendo a Rose Hanbury en una gala benéficaGtres

Forman una de las parejas royal más aparentemente perfectas. Así al menos lo parecía hasta que la sombra de la presunta infidelidad del príncipe William se cernió sobre ellos. La supuesta cena de San Valentín del príncipe de Gales con su presunta amante ha acaparado los titulares de la prensa británica a lo largo de todo el fin de semana pasado.

No era un secreto la relación de amistad que el primogénito de Carlos III mantiene desde hace tiempo con Rose Hanbury, ex amiga de Kate Middleton y con la que cortó toda relación en 2019 tras publicarse imágenes de su marido y Rose en una fiesta privada en actitud comprometida.

Kate Middleton y el príncipe Guillermo en el estreno de 'Sin tiempo para morir'.
Kate Middleton y el príncipe Guillermo en el estreno de 'Sin tiempo para morir'.Vianney Le CaerVianney Le Caer/Invision/AP

Más allá de que el "affaire" sea cierto o no... lo que llama notablemente la atención es que las noticias publicadas por los tabloides británicos han desaparecido como por arte de magia, lo que hace que la afirmación del príncipe Harry de la existencia de un supuesto "trato de favor" entre la familia real británica y los medios es una realidad. Las teorías de la conspiración cobran cada vez más fuerza. ¿Cómo es posible que el "escándalo" haya desaparecido por completo?

Parece que el principal motivo para que la "presunta infidelidad" de William a Kate haya desaparecido es no ensombrecer la coronación de Carlos III, prevista para el próximo 6 de mayo. William y Kate son el futuro de la institución monárquica en Reino Unido y esto no es más que una "mancha" en su impoluto currículum vital.

Una de las hipótesis que se baraja es que Buckingham podría haber apelado a la "super-injuction", una herramienta legal a la que se recurre para silenciar a los medios cuando determinados "hechos" atentan a la privacidad individual. una especie de "ley mordaza". Pero, debido a la propia naturaleza de la ley, es imposible probar que esto sea lo que ha ocurrido en el caso del príncipe William.

Richard Kay, cronista de la realeza en "The Daily Mail" cataloga las informaciones de "fake news": “Estos rumores dañinos son simplemente falsos. En su momento se llegó a contemplar la posibilidad de acciones legales, pero como no se ha aportado ningún tipo de evidencia, se ha decidido ignorarlos”, afirma.