La «Billy Elliot» española

Londres- La yudoca española Ana Carrascosa ha dado la vuelta a la película «Billy Elliot». Billy era un chico que quería ser bailarín y su padre se empeñó en apuntarlo a boxeo. Al final pudo más el deseo del chaval. Ana comenzó haciendo ballet en su colegio de Valencia, cuando sólo tenía cinco años. Allí la llevó su madre. «Pero no me gustaba», reconoce. Y cada tarde se escapaba de su clase de baile para irse muy cerca, al lado, donde su hermano practicaba yudo. Billy Elliot quería bailar, y bailó. La pequeña y rebelde Ana quería hacer yudo, y tenía que recurrir a una travesura para lograrlo. «Jesús, mi entrenador de niña, le contó a mi madre que no estaba haciendo ballet», afirma la valenciana. Y la madre se lo creyó porque había algo que la delataba: sus zapatillas de baile parecían nuevas, apenas estaban usadas.

Carrascosa se salió con la suya y hoy disputará sus segundos Juegos en la categoría de -52 kilos. Los de Barcelona 92 le ayudaron a crear su sueño olímpico, y su primer título de campeona de España en 1995 lo confirmó: «Esa adrenalina, ese momento, hizo que quisiera más», desvela. Y llegó «más» en Mundiales (dos bronces) y Europeos (una plata y un bronce). Su clasificación para Londres fue en el último momento: se jugaba la plaza en el pasado Europeo con Laura Gómez y compitió con un esguince en una rodilla que se había hecho unos días antes. Hizo lo que pudo, fue quinta, pero su compatriota fue descalificada por una acción antirreglamentaria en el combate que le iba a llevar a los Juegos. En Pekín, hace cuatro años, Ana no pudo luchar a tope porque se le salió un hombro. «Me dolió el hombro y el corazón», recuerda. Esta vez Billy Elliot puede volver a ganar.