Cine

Barcelona

La calle a ritmo de rap muerto»

Langui debuta como actor con el papel de un entusiasta discapacitado

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La calle a ritmo de rap muerto»larazon

C. David carrón Un director demasiado oscuro para ser de Carabanchel, aunque así lo indica su partida de nacimiento; un protagonista con una disminución física, un gitano y un mulato enganchado a la droga podrían convertirse en el conjunto ideal para una película con moralina. Es todo lo contrario de lo que han pretendido Santiago A. Zannou y Juan Manuel Montilla, «Langui», integrante del grupo de hip hop La Excepción. Como suele ocurrir con las historias que parten de personajes verídicos, la ficción tiene poco que ver con la realidad, aunque las apariencias apunten lo contrario: «Las similitudes entre el actor y el personaje son tres -explica Langui-: la parálisis cerebral, que nos afecta al cuerpo de los dos, el afán de superación, yo también me caigo y me levanto con la misma facilidad, y la pasión por la música. Lo demás es ficción y muchas horas de trabajo». Barcelona marginal Cuajo, este personaje con tanto afán de superación como mala leche, surgió mientras Zannou observaba las dificultades de Woulfrank, productor musical, y Langui para grabar el primero disco de La Excepción. Langui, debutante en este rodaje que llenó de técnicos la Barcelona más marginal, asegura que «la experiencia de olvidarse de tu ¿yo¿ durante un tiempo me ha subido la adrenalina». Si algún paralelismo tuviera que establecer entre sus dos facetas profesionales, responde seguro que «las primeras tomas siempre son las mejores porque resultan más espontáneas. Es como cuando entras a un estudio de grabación, que al empezar a cantar estás mejor de voz, más fresco...». Ese método tan intuitivo no debe haberle fallado a Langui, pues opta a mejor actor revelación en los Goya, ni a su realizador, que se batirá en la categoría de director novel y opta además a mejor canción original. Langui dice que no quiere acariciar aún la posibilidad de que la estatuilla duerma en su casa a a partir del 1 de febrero, pero se atreve a hacer una petición a los directores que quieran contratarle: «Que las historias que me lleguen sean honestas». «Cuajo es cojonudo» «Supongo que la gente que sigue a La Excepción irán a ver la película , aunque sea por curiosidad». «El Gitano Antón desde siempre me ha apoyado. También conoce al director desde hace muchos años y le ofreció un papel en la película, pero no aceptó»