Perdonó «Kun»

Los grandes partidos deben ser para las grandes estrellas. El primero en decir aquí estoy para lo que gusten mandar fue Robben. El primer rojiblanco que manifestó su presencia en el Santiago Bernabéu fue Forlán con el gol que puso a su equipo en ventaja. El Real Madrid dio los primeros sustos en el derbi y Leo Franco justificó su categoría de estimable guardameta. Casillas acabó siendo el salvador de su equipo. Pudo haber sido la gran noche de «Kun» Agüero, pero perdonó las mejores ocasiones de gol. Él las creó y él las malbarató. Los derbis también obligan a los entrenadores. Juande Ramos no arriesgó un alamar defensivamente y colocó a Diarra II como lateral, para cerrar también esa banda por la que entraría Simao. Abel también fue previsor y apostó por Heitinga en el lateral derecho. No tenía quien le diera más confianza en la zona de retaguardia. Juande cambió en la segunda mitad. Entró Salgado con el hacha, Marcelo se retrasó y jugó en el lateral por Heinze. La presencia de Higuaín fue providencial para que llegara el gol en fuera de juego de Huntelaar. El técnico madridista se desdijo en la segunda parte. El Real Madrid suplió a Pepe con Sergio Ramos y no salió perdiendo. El defensa andaluz le ganó varias carreras a Agüero. El Atlético de Madrid mejoró su presencia en el centro del campo con lo que trató de ahogar la salida madridista durante la segunda mitad. Al contragolpe tuvo al Madrid varias veces a su merced. Es muy difícil crear tantas ocasiones de gol en un partido. Quizá no tenga otra oportunidad similar en años. Forlán, sacrificado y luchador incansable, fue la figura de las estrellas.