La increíble historia de Viktor, el gato que voló en primera clase

Mikhail Galin se las prometía muy felices cuando decidió que su gato, Viktor, le iba a acompañar en el vuelo que tomarían ambos desde Moscú a Vladivostok. Según las normas de la aerolínea rusa Aeroflot, aquellas mascotas que pesen más de ocho kilos deben volar en el interior de la cabina del avión.

Cuando Galin se dio cuenta de que su felino excedía el límite, ya que pesa unos diez kilos, decidió idear un astuto plan. Cambió a Viktor por un gato de menor peso para poder evitar así las restricciones de peso de Aeroflot.

Sin embargo parece que no terminó de atar todos los posibles cabos sueltos, ya que publicó en su cuenta de Facebook una foto de ambos en el interior del avión que se ha hecho viral. En la publicación, Galin dijo que había llevado a Viktor con él en un vuelo desde la capital letona, Riga, a la ciudad de Vladivostok, en el extremo oriental de Rusia, que incluía previamente una escala en Moscú.

El plan comenzó a torcerse cuando se disponía a coger el segundo vuelo, ya que el personal de la aerolínea no le permitió llevar consigo a bordo a Viktor. Galin, que no estaba dispuesto a a abandonar a su suerte a Viktor, en la bodega de equipaje, retrasó su vuelo y tomó la decisión estratégica de encontrar un gato similar de menor peso en Moscú. Un día después, Mikhail regresó al aeropuerto con el gato para devolvérselo a sus dueños, antes de volar a Moscú.

La publicación de Facebook llamó la atención de Aeroflot, lo que lo llevó a iniciar una investigación que confirmó el intercambio de gatos en CCTV. Esto ha dado sus frutos, ya que la aerolínea rusa ha decidido retirarle todos los puntos que ostentaba. En otra publicación posterior, Galin pareció aceptar su castigo con buen humor. Compartió una foto de Viktor de "cuando su peso aún cumplía con los requisitos de la compañía aérea".