Australia cambia los helicópteros europeos Taipan por los Blackhawks de EEUU “porque son más fiables”

Primero fueron los submarinos estadounidenses. Australia anunció hace un mes que rompía un contrato con Francia para comprar a Estados Unidos ocho submarinos de propulsión nuclearque utilizan tecnología estadounidense y británica en un cambio que enfureció a Francia, todo dentro del marco de una nueva alianza militar bautizada como Aukus. Y ahora son los helicópteros. El ejército de Australia ha anunciado este viernes que planea deshacerse de su flota de helicópteros de transporte y asalto Taipan de diseño europeo para adquirir en su lugar los famosos Blackhawks y Seahawks estadounidenses porque las máquinas estadounidenses son más “fiables”.

Según la agencia AP, Australia tiene actualmente 47 helicópteros Taipan, que fueron diseñados por NH Industries -empresa propiedad de Airbus Helicopters, Leonardo Helicopters y Fokker-. Se suponía que estos aparatos durarían hasta el año 2037, pero los helicópteros europeos han sufrido estos años problemas logísticos, de calidad de piezas y de software que afectaron a la disponibilidad y a la seguridad de vuelo. El primer ministro Scott Morrison ha defendido que Australia se encuentra en pleno proceso de mejora de sus capacidades de defensa y que ha encontrado en Estados Unidos un buen socio para ayudarle. “Los Taipans no estaban cumpliendo con sus objetivos. Tan simple como eso”, dijo Morrison. “Queremos asegurarnos de que nuestras fuerzas de defensa tengan el mejor equipo posible para defender este país; los Blackhawks se lo proporcionarán”.

Por este motivo, Australia dejará de usarlos y ha decidido comprar 40 helicópteros diseñados por Lockheed Martin.Esta medida supondrá un cambio para las arcas nacionales de hasta 7.000 millones de dólares australianos, unos 4.800 millones de dólares. Los Taipan europeos entraron en servicio en el escuadrón Escuadrón 808 de la Marina Real de Australia en 2013 para labores de apoyo marítimo en sustitución del helicóptero Sea King. El Ejército, por su parte, comenzó a usarlo para reemplazar a los Blackhawk en el campo de batalla y en operaciones especiales.

Durante la puesta de largo de los Taipan en 2013, el almirante Tim Barrett dijo: “Hay varias naciones alrededor del mundo que están introduciendo variantes del helicóptero MRH 90, pero el Escuadrón 808 es líder mundial en el nivel de capacidad que se logra con este nuevo avión, particularmente en sus operaciones en el mar”. Tras ocho años en servicio, las autoridades australianas piensan de distinta manera. Los expertos creen que no solo influyen los problemas de funcionamiento de los aparatos sino la participación de Australia en la alianza militar Aukus, mediante la cual Estados Unidos ha decidido compartir tecnología militar avanzada con las autoridades australianas a cambio de su mayor compromiso en el Pacífico para frenar a China y la compra de submarinos de propulsión nuclear.

El ministro de Defensa australiano, Peter Dutton, aseguró que los Blackhawks son mucho más fáciles de volar y que los funcionarios han estado preocupados por el programa Taipan durante la última década. “Ha habido hasta nueve casos en los que no ha estado disponibles para volar, y simplemente no voy a poner a nuestro pueblo en esa posición”, dijo Dutton, quien añadió que los nuevos helicópteros acercarán la flota de Australia a la de Estados Unidos, una consideración importante dada la inestabilidad en la región.

Lockheed Martintiene en pleno desarrollo el helicóptero Defiant X, de Sikorsky y Boeing, que es uno de los dos candidatos para reemplazar al icónico Black Hawk del Ejército de EEUU. El Defiant X vuela el doble de rápido y el doble de lejos, lo que brinda a las fuerzas de asalto aéreo del Ejército una movilidad en el campo de batalla sin igual.

China ha expresado en el pasado reciente su enfado por el cambio de submarinos de Australia y su alianza con Reino Unido dentro de Aukus. Para Pekín es “irresponsable” exportar la tecnología nuclear de Estados Unidos y Gran Bretaña. Por su parte, los partidos de la oposición en Australia dijeron que el gobierno australiano había desperdiciado miles de millones de dólares en malas decisiones en torno a muchos de sus contratos de defensa.