Terrorismo

Piden acciones contra Nigeria por los ataques del yihadismo contra los cristianos

Nuevos atentados en este país y en Mozambique plantean un panorama “espantoso”

Terroristas del Estado Islámico entran en una aldea cristiana en Mozambique para destruirla
Terroristas del Estado Islámico entran en una aldea cristiana en Mozambique para destruirlajmz

Esta vez han sido cinco cristianos los asesinados en la región de Kogi, en el centro de Nigeria; y un nuevo ataque en Mozambique en la aldea cristiana de Letandakwa, en la región Macomia, en Cabo Delgado.

El Estado Islámico (Isis, Daesh) informa hoy de estas nuevas atrocidades dentro de su estrategia de hacer desaparecer la religión cristiana de África.

La situación es tan grave que un total de 68 grupos y expertos de todo el mundo han dirigido una carta a Antony Blinken, Secretario de Estado de Estados Unidos, en la que piden que se reasigne a Nigeria como país de particular preocupación (CPC); es decir, una nación que tolera violaciones graves de la libertad religiosa de una manera flagrante, sistemática y continua.

“Pedimos que designe a Nigeria como un país de particular preocupación (CPC) y designe un enviado especial para investigar la situación y hacer recomendaciones, en consulta con los representantes locales”, indica la carta. Entre los firmantes está la organización de defensa legal cristiana ADF Internacional, informa ACI.

La última designación CPC para Nigeria sucedió en el 2020 durante el gobierno de Donald Trump, pero un año después, durante la administración de Joe Biden, fue retirada sin explicación alguna de la lista de vigilancia de países con las más atroces violaciones de derechos humanos por motivos religiosos.

Entonces, la Comisión de los Estados Unidos para la Libertad Religiosa Internacional (USCIRF) calificó la eliminación de este estatus de Nigeria como “espantosa”.

En la carta, se subraya que “después de la eliminación” de Nigeria se “aumentó tanto el nivel general de violencia como el ataque específico a los cristianos”.

La ONG Open Doors destaca que en Nigeria, durante 2021, fueron asesinados 4.650 cristianos, más que en todos los demás países del mundo juntos. La International Society for Civil Liberties & the Rule of Law, por su parte, considera que la tendencia para 2022 está en camino de superar ese número, con no menos de 2.543 cristianos asesinados en la violencia relacionada con el yihadismo en la primera mitad de 2022.

“Es innegable que se cometen graves violaciones de la libertad religiosa casi a diario en Nigeria, y las cosas solo empeoran (…) el secretario Blinken debería aprovechar esta oportunidad ahora para corregir este error”, según el asesor legal para la Libertad Religiosa Global de ADF International.

Demasiadas personas están muriendo, demasiados sacerdotes están siendo secuestrados y la comunidad internacional debería hablar con una sola voz sobre estas violaciones de la libertad religiosa en serio. Tenemos que hablar en voz alta por todas las víctimas en Nigeria”, añade.

La carta plantea preocupaciones sobre el aumento de la violencia contra “cristianos y musulmanes que rechazan el extremismo” por parte de grupos terroristas como Boko Haram y el Estado Islámico - Provincia de África Occidental (ISWAP), así como otras bandas similares.

La misiva analiza varias violaciones graves de la libertad religiosa, como la masacre del domingo de Pentecostés de 2022 en la que murieron más de 40 católicos en la iglesia católica San Francisco Javier en Owo, estado de Ondo. Además, plantea preocupaciones sobre los ataques contra periodistas en Nigeria, como Luka Binniyat, quien informó sobre ataques contra cristianos por parte de las milicias.

Al final de la carta se reitera la importancia de reintegrar a Nigeria en el listado de países de particular preocupación. “La designación del CPC y el Enviado Especial son vitales para reconocer la gravedad de las violaciones de la libertad religiosa que ocurren en el país y la falta de voluntad del gobierno para controlar los problemas, así como su contribución a los problemas”, concluye.