Castigo

China sanciona a Lockheed Martin, fabricante del F-35, y Raytheon por enviar armas a Taiwán

Pekín lanza un contraataque a EEUU en la guerra comercial y tecnológica en una nueva escalada de tensiones entre las dos economías más grandes del mundo

El sistema THAAD de Lockheed Martin
El sistema THAAD de Lockheed MartinLockheed MartinLockheed Martin

China ha anunciado sanciones comerciales este jueves contra dos de las empresas más poderosas de la industria militar de Estados Unidos. Se trata Lockheed Martin, fabricante del icónico avión de combate F-35 y el mayor exportador de armas del mundo, y Raytheon. Ambas son acusadas por Pekín de suministrar armas a Taiwán, considerada por el gigante asiático como una "isla rebelde". EEUU apoya militarmente a Taipei y el presidente Joe Biden ha dicho en varias ocasiones que si China invade la isla, Estados Unidos intervendrá para ayudar a su aliado.

A partir de ahora, estas empresas tienen prohibido importar bienes a China o realizar nuevas inversiones en el país, según anunció el Ministerio de Comercio. Además, las dos empresas han sido multadas con el doble del valor del contrato de sus ventas de armas a Taiwán desde septiembre de 2020, que fue de 360 millones de dólares en el caso de Lockheed Martin. Ambas firmas deberán pagar la multa dentro de los 15 días, según el comunicado. Si no lo hacen, el ministerio chino podría aumentar la cuantía del castigo.

En 2020, Pekín anunció sanciones contra Lockheed Martin, por ser una de las compañías beneficiarias de la venta que Washington aprobó para modernizar los misiles tierra-aire Patriot taiwaneses.

No está claro qué impacto podrían tener las sanciones en Lockheed Martin o Raytheon, que produce el misil hipersónico para el programaHypersonic Air-Breat Weapon Concept (HAWC). Sin embargo, la agencia Bloomberg estima que estas medidas tengan un efecto más simbólico dado que ambas empresas tienen una baja exposición directa en China.

Lockheed Martin es el mayor fabricante de armas del mundo. Tiene acuerdos con decenas de países y ha diversificado su negocio hacia las energías renovables y la nuclear, si bien el grueso de sus ingresos procede de la venta de su producto número uno, el caza de quinta generación F-35.

Actualmente, Estados Unidos prohíbe la mayoría de las ventas de tecnología relacionadas con armas a China, pero algunos contratistas militares también tienen negocios civiles en la industria aeroespacial y otros mercados.

Este golpe comercial de China a su gran rival geoestratégico se produce en medio de una escalada de tensión por la crisis de los globos. EEUU derribó un aerostato chino en las costas de Carolina del Sur a principios de mes al considerar que estaba realizando misiones de espionaje. Pekín, por su parte, ha acusado a Washington de enviar a China varios globos durante los últimos meses.

El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, canceló un viaje planeado a Pekín por esta crisis. No está claro si las sanciones contra Lockheed Martin y Raytheon impedirán una posible reunión entre Blinken y Wang Yi, el principal diplomático de China, al margen de la Conferencia de Seguridad de Munich esta semana.

Taiwán y China se separaron en 1949 después de una guerra civil. La isla nunca ha sido parte de la República Popular China, pero el Partido Comunista dice que está obligado a unirse con el continente, por la fuerza si es necesario. El gobierno del presidente Xi Jinping ha intensificado sus esfuerzos para intimidar a Taiwán volando aviones de combate y bombarderos cerca de la isla y disparando misiles al mar.