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Documentos clasificados del Pentágono

La CIA bloqueó el plan de Ucrania para atacar Moscú el 24 de febrero

El jefe de la inteligencia militar ucraniana, Kirilo Budanov, planeaba una ofensiva en suelo ruso para el primer aniversario de la invasión

El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, visita a los soldados en la línea de frente. 19/04/2023
Ucrania.- Mueren dos guardias fronterizos de Ucrania al volcar una embarcación en ChernígovEuropa Press/Contacto/Pool /UkraEuropa Press

Washington se ha visto obligado a frenar a Kiev en sus planes para atacar en suelo ruso, según los documentos clasificados del Pentágono filtrados en la red social Discord. El jefe de la inteligencia militar de Ucrania, Kirilo Budanov, habría dado instrucciones a sus oficiales para preparar “ataques masivos el 24 de febrero” con todo el material al alcance de la Dirección Principal de Inteligencia. Entre los objetivos que detalla el informe estaría la ciudad de Novorosíisk, a orillas del mar Negro. Una acción simbólica para desestabilizar al invasor y trasladar la guerra hasta su territorio.

Las operaciones en el extranjero son competencia de la inteligencia militar ucraniana, conocida como la HUR. Budanov, un mayor general del Ejército ucraniano de 37 años, es el arquitecto de las operaciones. Pero la comunidad de inteligencia de Estados Unidos, que vigila de cerca las comunicaciones de sus aliados ucranianos, conocía sus intenciones y decidió intervenir a tiempo para evitar que materializaran. La Casa Blanca teme que los ataques dentro de Rusia provoquen una respuesta agresiva del Kremlin, relacionada con el uso de armas nucleares tácticas.

Dos días antes del primer aniversario de la invasión rusa de Ucrania, la CIA difundió un nuevo informe clasificado en el que destacaba que la HUR “había acordado, a petición de Washington, posponer los ataques” en Rusia, pero no aportaba más detalles. Budanov, conocido por sus declaraciones altisonantes sobre Vladímir Putin o la península de Crimea, habría decidido dar marcha atrás tras la advertencia. Pero la inteligencia ucraniana no descarta atacar más allá de sus fronteras.

En este sentido, los documentos clasificados del Pentágono han puesto al descubierto los planes de la HUR para atacar al contingente del Grupo Wagner desplegado en Mali para combatir la insurgencia yihadista en el Sahel como represalia por las atrocidades que han cometido los mercenarios rusos en el este de Ucrania a las órdenes del oligarca Yevgeny Prigozhin. La inteligencia militar de Kiev barajó, además, llevar a cabo ataques encubiertos contra las fuerzas rusas en Siria con la asistencia de los kurdos, reveló el Washington Post. Pero el propio Volodímir Zelenski desechó finalmente la idea.

Es evidente que Kiev pretende desplazar la guerra contra Moscú más allá de su propio territorio. Pero este escenario podría desencadenar una serie de consecuencias que preocupan en las cancillerías europeas y en Washington, especialmente si el Ejército ucraniano utiliza armamento estadounidense en este tipo de operaciones. Por este motivo, Estados Unidos prohíbe a Ucrania utilizar sus armas para atacar a las fuerzas rusas y supervisa sus actividades en el campo de batalla.

En la Casa Blanca preocupa también que China pueda considerar los ataques ucranianos en territorio ruso como “una oportunidad para presentar a la OTAN como el agresor” en el conflicto. Pekín podría verse inducido a suministrar armas a Moscú en caso de que los ataques en territorio ruso sean “significativos”, recogen los documentos a los que ha tenido acceso el Washington Post. Un factor que alteraría el guion de la guerra.

A pesar de las recurrentes advertencias de la CIA, han seguido produciéndose algunos episodios en Rusia en los que pueden estar involucrados tanto particulares como las autoridades ucranianas. Un ejemplo fue el presunto atentado en el que murió Daria Dúguina, la hija del filósofo ruso ultraconservador Aleksandr Duguin. Otro, la bomba en San Petersburgo que acabó con la vida del militar y bloguero nacionalista, Vladlén Tatarsk. Así como los ataques contra bases militares rusas cercanas a la frontera con Ucrania.