Tensión

EE UU negocia con Alemania el cierre del gasoducto NordStream2 si Putin invade Ucrania

Los intentos de los aliados por la “vía diplomática” para aliviar la creciente tensión de la crisis en Ucrania no han avanzado ni alcanzado tampoco ningún acuerdo

Los intentos de acercamiento entre Rusia y Estados Unidos y sus aliados por la “vía diplomática” para aliviar la creciente tensión de la crisis en Ucrania no han avanzado, por ahora, ni alcanzado tampoco ningún acuerdo.

A medida que sigue aumentando la tensión por la presencia militar rusa en la frontera con Ucrania y se continúan impulsando esfuerzos para resolver el conflicto a través del “diálogo”, Estados Unidos y Alemania endurecerán su posiciones con medidas drásticas que afectarán a la economía de Rusia y de Europa.

La decisión más destacada de estas posibles sanciones económicas y fuertes medidas que EEUU y Alemania pretenden implementar si Rusia invade Ucrania, según anunciaron altos funcionarios de ambas potencias este miércoles, destaca el gasoducto Nord Stream 2, que supone una fuente de suministro de gas “estratégicamente vital” y que conecta directamente Rusia con Alemania.

La producción doméstica de gas de la Unión Europea está en declive. Bajo ese contexto, el ambicioso proyecto del gasoducto Nord Stream 2 está diseñado para transportar gas desde las reservas más grandes del mundo, situadas en Rusia, hasta el mercado interno de la UE, proporcionando “nuevos suministros de gas fiables, asequibles y sostenibles” para satisfacer la demanda de Occidente y abastecer a más de 26 millones de hogares alemanes con combustible a muy bajo precio.

Pero, insisten EEUU y Alemania, el novedosos gasoducto no se abrirá si Rusia decide llevar a cabo una invasión militar en Ucrania. Así lo puso de manifiesto el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, confirmando que la Administración Biden está “trabajando con Alemania” para garantizar el apoyo necesario en el caso de perder el abastecimiento de gas ruso.

“Quiero ser muy claro: si Rusia invade Ucrania de una u otra forma, Nord Stream 2 no avanzará”, declaró Price el miércoles por la noche en una entrevista radiofónica. “No voy a entrar en detalles. Trabajaremos con Alemania para asegurarnos de que no avance”, añadió el portavoz del Departamento de Estado de EEUU.

La Casa Blanca confirmaba poco después, el jueves por la mañana, la visita oficial del canciller alemán Olaf Scholz el próximo 7 de febrero. Biden lo recibirá en la residencia presidencial para “afirmar los lazos profundos y duraderos entre Estados Unidos y Alemania”, así como discutir “su compromiso compartido tanto con la diplomacia en curso como con los esfuerzos conjuntos para disuadir en caso de una mayor agresión rusa en Ucrania”, anunció la Casa Blanca a través de un comunicado.

Asimismo, el presidente Joe Biden y su homólogo alemán tienen previsto abordar “la importancia de una cooperación estrecha y continua en una variedad de desafíos comunes”, tales como la pandemia, el cambio climático y la promoción de la prosperidad económica y la seguridad internacional “sobre la base de nuestros valores democráticos compartidos”, añadió Jen Psaki, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, en el comunicado.

EEUU emitió una respuesta por escrito, entregada en mano por su embajador en Moscú, a las demandas de Rusia de que la OTAN retire sus tropas en Europa del Este y prohíba que Ucrania, antiguo estado de la Unión Soviética, forme parte como país miembro de la Alianza Atlántica.

Ni Biden ni sus aliados de la OTAN están dispuestos a dejar que Rusia utilice sus propios intereses para condicionar las decisiones estratégicas de la Alianza, reiterando en el documento por escrito su compromiso de defender la política de “puertas abiertas” de la OTAN a través del “diálogo” y ofreciendo a Vladimir Putin una “evaluación pragmática basada en principios básicos”, pero en cualquier caso no se tratará de una “negociación”.

“Poner las cosas por escrito es una buena manera de asegurarnos ser lo más precisos posible y que los rusos entiendan nuestras posiciones, nuestras ideas, con mayor claridad”, puntualizó el secretario de Estado de EEUU en una conferencia de prensa. “En este momento, el documento está en sus manos” y “la pelota en su tejado”, añadió Antony Blinken.

Si Rusia decidiera actuar con los más de 100.000 soldados que tiene desplegados desde hace semanas en las fronteras con su país vecino y finalmente invadiera Ucrania, a pesar de haber negado esas intenciones en numerosas ocasiones, tanto Estados Unidos como sus aliados europeos anunciaron activar “graves consecuencias” a esas acciones militares.