Energía

La UE promete una “respuesta fuerte” si hubo sabotaje en los gasoductos rusos

Los sismólogos suecos registraron explosiones antes de los misteriosas fugas en el Nord Stream 1 y 2

Dinamarca lo tiene claro. Las fugas detectadas el lunes en los gasoductos Nord Stream 1 y 2 no son fortuitas. “La opinión de las autoridades es que se trata de acciones deliberadas”, asegura la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, que advirtió de que el incidente se está tomando “muy en serio”.

Los cables del gasoducto se hallan a una profundidad de entre 70 y 80 metros y los datos sismológicos tanto en Suecia como en Dinamarca muestran que ocurrieron explosiones en ambas líneas casi al mismo tiempo que se detectaron caídas de presión en las líneas. Aunque inactivos actualmente, ambos gasoductos almacenan gas en su interior.

El tamaño de la fuga lleva a las autoridades danesas a descartar un accidente como posible causa del accidente. “Esto indica que estamos hablando de agujeros tan grandes que no puede tratarse, por ejemplo, de un ancla de barco”, explica Dan Jørgensen, ministro de Energía.

Las tres fugas de gas en los gasoductos Nord Stream 1 y 2 fueron visibles el martes en aguas frente a Dinamarca con enormes áreas de burbujeo que se extendían de 200 a 1.000 metros de diámetro, informó el Ejército danés. “La fuga más grande está provocando burbujas de más de un kilómetro de diámetro. La más pequeña está creando un círculo de unos 200 metros” de diámetro, escribió el Ejército en un comunicado que acompaña a las fotografías de las fugas en la isla danesa de Bornholm, la isla danesa por debajo de la cual transcurren los gasoductos. Copenhague calcula que la fuga pueda prolongarse durante una semana.

Con todo, el Gobierno socialdemócrata descarta que haya aumentado la amenaza contra Dinamarca. Tampoco se considera que las filtraciones representen una amenaza directa para los residentes de Bornholm. Pero las Fuerzas Armadas danesas han incrementado su presencia en la zona con patrulleras y una fragata. “Ha ocurrido en aguas internacionales. No es un ataque a Dinamarca”, explica Mette Frederiksen.

La Red Nacional Sísmica de Suecia registró dos “liberaciones masivas de energía” poco antes de que las fugas de gas cerca de sus ubicaciones frente a la costa de la isla danesa de Bornholm, aseguró a la AFP el sismólogo de la Universidad de Uppsala, Peter Schmidt. “Con liberaciones de energía tan grandes, no hay mucho más que una explosión que pueda causarlo”, agregó. “Puedes ver que son bastante repentinos. Es una liberación de energía muy repentina. No es un colapso lento de algo”.

Según Tomas Kåberger, profesor de Política Energética Industrial en la Universidad Tecnológica de Chalmers, existen varias teorías que pueden explicar las fugas de gas. “La teoría más probable es que alguien debió haber destruido intencionalmente las tuberías”, constata Kåberger. “No es increíble que se trate de algún tipo de daño intencional precisamente porque hay más de un daño en más de un lugar. No sabemos qué es”, añade el experto. “Pero una lección importante de esto y de las cosas que han sucedido en relación con la crisis de Ucrania es que este tipo de infraestructura energética con grandes flujos de energía es muy vulnerable”, continúa Kåberger.

Tras hablar por teléfono con la primera ministra danesa, la presidente de la Comisión Europa, Ursuala von der Leyen, prometió que habrá “una respuesta fuerte” en caso de que se concluya que fue una “acción de sabotaje”. “Ahora es primordial investigar los incidentes, obtener total claridad sobre los eventos y por qué. Cualquier interrupción deliberada de la infraestructura energética europea activa es inaceptable y conducirá a la respuesta más fuerte posible”, aseguró Von der Leyen.

Los oleoductos han estado en el centro de las tensiones geopolíticas en los últimos meses cuando Rusia cortó el suministro de gas a Europa en represalia contra las sanciones occidentales tras su invasión de Ucrania.

Una de las fugas del Nord Stream 1 se produjo en la zona económica danesa y la otra en la zona económica sueca, mientras que la fuga del Nord Stream 2 se produjo en la zona económica danesa.

La agencia de energía danesa aseguró a la agencia de noticias Ritzau que solo el área donde se encuentra la columna de gas se verá afectada por la fuga, pero el metano que se escapa a la atmósfera tiene un “efecto dañino para el clima”. “Las rupturas de gasoductos ocurren muy raramente y, por lo tanto, vemos la necesidad de elevar el nivel de alerta como resultado de los eventos que hemos visto durante el último día”, declaró el director de la Agencia Danesa de Energía, Kristoffer Böttzauw, en un comunicado.